(A María Kodama)
#1976 #EscritoresArgentinos #LaMonedaDeHierro
Sé que he perdido tantas cosas que no podría contarlas y que esas perdiciones, ahora, son lo que es mío. Sé que he perdido el amarillo y el negro y pienso en esos imposibles colores com...
El hombre que desembarcó en Buenos Aires en 1871 se llamaba Johannes Dahlmann y era pastor de la Iglesia evangélica; en 1939, uno de sus nietos, Juan Dahlmann, era secretario de una bib...
Han cambiado las formas de mi sueñ… ahora son laterales casas rojas y el delicado bronce de las hojas y el casto invierno y el piadoso l… Como en el día séptimo, la tierra
Entra la luz y me recuerdo; ahí es… Empieza por decirme su nombre, que… Vuelvo a la esclavitud que ha dura… Me impone su memoria. Me impone las miserias de cada día…
Mi relato será fiel a la realidad o, en todo caso, a mi recuerdo personal de la realidad, lo cual es lo mismo. Los hechos ocurrieron hace muy poco, pero sé que el hábito literario es as...
Cierro los ojos y veo una bandada de pájaros. La visión dura un segundo o acaso menos; no sé cuántos pájaros vi. ¿Era definido o indefinido su número? El problema involucra el de la exi...
Odín o el rojo Thor o el Cristo… Poco importan los nombres y sus di… no hay otra obligación que ser val… y Einar lo fue, duro caudillo de h… Era el primer arquero de Noruega
Sin fin el mar. Sin fin el pez, l… serpiente cosmogónica que encierra… verde serpiente y verde mar, la ti… como ella circular. La boca muerde la cola que le llega desde lejos,
Superados los círculos del Infierno y las arduas terrazas del Purgatorio, Dante, en el Paraíso terrenal, ve por fin a Beatriz; Ozanam conjetura que la escena (ciertamente una de las más...
Al cabo de cincuenta generaciones (Tales abismos nos depara a todos… Vuelvo en la margen ulterior de un… Que no alcanzaron los dragones del… A las ásperas y laboriosas palabra…
La función poética –ese vehemente y solitario ejercicio de combinar palabras que alarmen de aventura a quienes las oigan– padece misteriosas interrupciones, lúgubres y arbitrarios eclip...
Alguien recorre los senderos de Ít… y no se acuerda de su rey, que fue… hace ya tantos años; alguien piensa en las tierras here… y en el arado nuevo y el hijo
Nada o muy poco sé de mis mayores portugueses, los Borges: vaga gent… que prosigue en mi carne, oscurame… sus hábitos, rigores y temores. Tenues como si nunca hubieran sido
Sin que nadie lo sepa, ni el espej… ha llorado unas lágrimas humanas. No puede sospechar que conmemoran todas las cosas que merecen lágrim… la hermosura de Helena, que no ha…
A un compadrito le canto que era el patrón y el ornato de las casas menos santas del barrio de Triunvirato. Atildado en el vestir