(A María Kodama)
#1976 #EscritoresArgentinos #LaMonedaDeHierro
Murieron otros, pero ello aconteci… Que es la estación (nadie lo ignor… ¿Es posible que yo, súbdito de Ya… Muera como tuvieron que morir las… Del Diván de Almotásim el Magreb…
De las regiones de la hermosa tier… Que mi carne y su sombra han fatig… Éres la más remota y la más íntima… Última Thule, Islandia de las nav… Del terco arado y del constante re…
Una amistad hicieron mis abuelos con esta lejanía y conquistaron la intimidad de los… y ligaron a su baquía la tierra, el fuego, el aire, el a…
Que un hombre del suburbio de Buenos Aires, que un triste compadrito sin más virtud que la infatuación del coraje, se interne en los desiertos ecuestres de la frontera del Brasil y lleg...
Una espada, una espada de hierro forjado en el… una espada con runas que nadie podrá desoír ni descifra… Una espada que los poetas
Las naves de alto bordo, las azule… espadas que partieron de Noruega, de tu Noruega y depredaron mares y dejaron al tiempo y a sus días los epitafios de las piedras rúnic…
Por el deceso de alguien —misterio cuyo vacante nombre pose… hay hasta el alba una casa abierta… una ignorada casa que no estoy des… pero que me espera esta noche
Quién les hubiera dicho que sus mayores vinieron por un mar, quién les hubiera dicho lo que son un mar y sus aguas. Mestizos de la sangre del hombre blanco, lo tuvieron en poco, mestizo...
Henry James—cuya labor me fue revelada por una de mis dos protagonistas, la señora de Figueroa—quizá no hubiera desdeñado la historia. Le hubiera consagrado más de cien páginas de ironí...
El tema de hoy será el budismo. No entraré en esa larga historia que empezó hace dos mil quinientos años en Benares, cuando un príncipe de Nepal—Siddharta o Gautama—, que había llegado ...
Venga un rasgueo y ahora, con el permiso de ustedes, le estoy cantando, señores, a don Nicanor Paredes. No lo vi rígido y muerto
Desde el crepúsculo del día hasta el crepúsculo de la noche, un leopardo, en los años finales del siglo XIX, veía unas tablas de madera, unos barrotes verticales de hierro, hombres y mu...
Es indudable que si bien hay muchos ingleses que conversan muy poco, hay muchísimos otros que no conversan. De ahí (tal vez) la no menos indudable excelencia del oral style o estilo con...
Recordar a quien duerme es un acto común y cotidiano que podría hacernos temblar. Recordar a quien duerme es imponer a otro la interminable
En la noche propicia a los lémures y a las larvas que hostigan a los… han cuartelado en vano los abierto… ámbitos de los astros tus augures. Del toro yugulado en la penumbra