Loading...

Promesas

Promesas, las promesas, esos votos
surgidos de las horas más divinas,
que al paso de las horas de rutinas
no serán más que compromisos rotos.
 
Un día te prometí floridos cotos
y a la postre te di cardos y espinas,
y el ser tu sombra donde tú caminas
solo fue para mí deseos devotos.
 
Promesas nada más: yo no soy dueño
de mi vida y sus flujos de dinero,
quisiera ser gigante y soy pequeño,
 
no me fue dado ser siempre el primero.
Pero puedo cumplir mi mejor sueño:
que yo quiero a quien quiero y yo te quiero.

Liked or faved by...
Other works by Jorge Leroux Romero...



Top