#1979 #Cotidianas #EscritoresUruguayos
Mi saldo disminuye cada día qué digo cada día cada minuto cada bocanada de aire muevo mis dedos como si pudieran
Luego del próximo recodo tal vez convenga irlo pensando sé de un viejo compatriota terrateniente él que en su colchón de muerte
Al principio ella fue una serena c… un rostro que no fingía ni siquier… unas manos que de a poco inventaba… una piel memorable y convicta una mirada limpia sin traiciones
En las manos te traigo viejas señales son mis manos de ahora no las de antes doy lo que puedo
País verde y herido comarquita de veras patria pobre país ronco y vacío tumba muchacha
Por lo menos habían transcurrido quince años sin que Ignacio supiera nada de Martín o de Alfonso. Nada, de modo directo, claro, ya que indirectamente le habían llegado esporádicas refer...
Está prohibido escribir sobre cier… así que voy a hablar de la violenc… el violento autorizado asiste comp… cartas de amor acaricia contigo lo… novia escucha tus murmullos tus de…
Desde todos los sueños cardinales llega la culpa como un aleluya se nos cuelga del alma y la acepta… como un interrogante de la noche y ella se queda pálida extenuada
Ésta debe ser la trigésima despedida. Es un trámite que Fernando Varengo conoce de sobra. Como testigo, claro; no como viajero. Asistir a la normal y apasionada discusión de Migue...
Un tal Lázaro Vélez se incorporó en su tumba, se despojó lentamente de su sudario, abandonó el camposanto y empezó a caminar en dirección a su casa. A medida que iba siendo reconocido, ...
La muerte es sólo una de las varias variantes del futuro quizá la más primaria acerca de las otras
Volvió el noble trabajo pucha qué triste que nos brinda el pan nuestro pucha qué triste me meto en el atraso
Cuando a uno lo expulsan a patadas del sueño el amanecer es siempre una modorra se emerge de ese ensayo de muerte todavía sellado por la víspera
La noche es inhumana. Nadie sabe cómo se cierra esa ventana oscura si no lo hace con su propia llave, replegado en su sombra y sin usura… con la memoria más que nunca alert…
Un tallito de verdes y un añoso al… las veinticuatro horas y el instan… una vislumbre dicha por las manos… el amor es un centro con extrañas… clausura y campo abierto