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Enrique Hernández Miyares

Enrique Hernández Miyares nació en Santiago de Cuba, Cuba, el 20 de octubre de 1859. A los quince años se trasladó con su familia a La Habana. Casi adolescente aún se inició en el periodismo con Diego Vicente Tejera. Como periodista desarrolló una amplia labor durante años en múltiples publicaciones. Fue redactor del Diario de Señoras y de El Almendares. Como corrector de pruebas y colaborador trabajó en El País. Su labor más importante la desarrolló en la Habana Elegante, cuya dirección ocupó a partir de 1888. Con Alfredo Zayas fue codirector de La Habana Literaria, que surgió tras la desaparición de la anterior en 1891. Tras la muerte de Casal presidió el comité encargado de levantar un mausoleo al poeta e instituyó el «Día de Casal» el 21 de octubre. En 1895 emigró a Estados Unidos, donde formó parte de la redacción de Patria y dirigió el semanario Cacarajícara. Regresó a Cuba en 1903 y se reintegró al periodismo. Con Diego Vicente Tejera publicó La Victoria. Fue redactor de El Triunfo, en el que publicaba artículos sobre temas de actualidad. Colaboró en La Discusión y El Fígaro. Fue miembro fundador de la Academia Nacional de Artes y Letras y secretario del Instituto de Segunda Enseñanza de La Habana. Como ministro plenipotenciario asistió a las fiestas del aniversario de la independencia de México. Utilizó los seudónimos Grisóstomo, Hernán de Henríquez y Juan de Jiguaní. Enrique Hernández falleció en La Habana, el 2 de agosto de 1914.

Rafael Esténger

Rafael Esténger. Escritor cubano que alcanzó gran prestigio en los siglos XIX y XX. Perteneció al Colegio Nacional de Periodistas y a la Academia Nacional de Artes y Letras. Inicios Nace en Santiago de Cuba, el 15 de octubre de 1899. Se graduó de Bachiller en Ciencias y Letras y se doctoró en Derecho Civil en la Universidad de La Habana en 1925. Rafael desempeñó múltiples cargos, entre ellos abogado de oficio en la Audiencia de Oriente, secretario de la Administración Municipal de Santiago de Cuba y consejero del Instituto Nacional de Reforma Económica. Estuvo vinculado al régimen de Gerardo Machado. Perteneció al Colegio Nacional de Periodistas y a la Academia Nacional de Artes y Letras. Obra literaria Rafael cosechó una extensa y rica obra literaria. Su poesía gozó de gran prestigio en los siglos XI y XX, tanto nacional como internacionalmente. Primeras publicaciones Publicó sus primeros versos en La Independencia, El Cubano Libre y otros periódicos de Santiago de Cuba. Fue jefe de redacción de El Sol y colaborador de Letras, El Fígaro, Cuba Contemporánea, Alerta, Avance y Bohemia. Compiló la antología Cien de las mejores poesías cubanas. Con motivo del centenario del natalicio de Antonio Maceo, Rafael reunió los discursos pronunciados en su honor en la Cámara de Representantes, bajo el título Homenaje a Maceo. Prologó La Vagancia en Cuba, de José Antonio Saco, y los Premios de cenáculo, de José Manuel Poveda, entre otros trabajos. Muerte Murió en el 2003. References EcuRed—https://www.ecured.cu/Rafael_Esténger

Francisco Machado

Del poeta Manuel Romero Márquez a Francisco Machado Su reinvindicación como poeta Tiene tres entradas aquella glorieta con tres bancos curvos en su plazoleta y unas librerías que esperan sus obras porque están vacías. La modesta fuente vierte su cristal sobre una gran taza nada original. Pero el agua clara mana todo el día como meridiana luz de poesía. Una placa oscura, que no tuvo historia hónrase a sí misma, dice: "A la memoria..." fueron tres maestros, tres glorias, tres hados y si ese recuerdo fue sólo por dos quizás más de uno esté equivocado: Fueron tres poetas Hermanos Machado. Lo ha dicho "su fuente" al besarla yo. (De su libro Versos de la vida, del amor y de la muerte. Sevilla, 1983) Francisco Machado fue el menor de los cinco hermanos Machado Ruiz., y como los dos mayores, Manuel y Antonio, también fue poeta. Poeta y escritor, pues varios fueron los campos literarios y periodísticos que cultivó con asiduidad.. Su obra, aparentemente escasa, no lo es en realidad. Una gran parte no llegó nunca a divulgarse, permaneciendo inédita, otra, dispersa en varias revistas y diarios, quedó olvidada con el paso de los años – solo algún que otro poema se recuerda de vez en cuando-, y el único libro que publicó,Leyendas Toledanas,que alcanzaría una segunda edición, es difícil encontrarlo. Varios son los poemas que se publicaron en revistas y diarios de su época, y varios los artículos de diverso contenido. Destacamos los de índole jurídica, generalmente relacionados con el Derecho Penal y la Criminología. Aunque ya están casi olvidadas fue bastante amplio su repertorio de canciones, todavía registradas en la SGAE figurando él como autor de las letras – algunas alcanzaron gran popularidad -. Finalmente queda su obra inédita, cuyos manuscritos se conservan. Esperamos que vean la luz en un día próximo, y si no se consigue en el formato tradicional de libro papel tal vez sí en formato de libro digital. Entre estas últimas obras se encuentra un volumen de poesías titulado “Ráfagas de inquietud”que, además de contener aquellos poemas que publicó en revistas y diarios, contiene muchas totalmente inéditas. Varios trabajos sobre temas jurídicos , criminología y sociología, otros de temas costumbristas, estampas de la época. Colaboraciones teatrales, y una importante colección de guiones cinematográficos – algunos de ellos basados en las leyendas toledanas que versificadas publicó -. A continuación reproducimos dos de sus poemas más conocidos: “El reloj de la cárcel” y “A Concepción Arenal”. Y en reconocimiento a Don Daniel Pineda Novo y a Don Enrique Sánchez Lubián por sus libros sobre Francisco Machado Ruiz, citamos y transcribimos sus palabras impresas sobre estos versos: EL RELOJ DE LA CÁRCEL Daniel Pineda Novo, “El otro Machado”. Guadalquivir Ediciones, Sevilla 2006. “y en versos heptasílabos y dos endecasílabos, el poeta concibe esta composición, que acusa la marcada influencia de la poesía de su hermano Antonio … En la desierta plaza, cubierta de una luz redonda, destaca el erecto reloj de la Cárcel, “con su campana vieja” ….Suenan las horas lentas, y sus tañidos lo llenan todo de una honda pena que penetra, que inunda hasta el corazón de los pobres reclusos… Quimeras, lúgubres sonidos, la armonía lenta, el eco ronco de un azadón en tierra… Palabras, frases, hondamente machadianas, con influencias de Bécquer… Bécquer y Antonio Machado se unen en este poema,,, Simbolismo y romanticismo; en verdad, Antonio Machado fue un romántico tardío, lo que asimiló su hermano Francisco”, “Francisco Machado utiliza en el poema una retórica muy de su tiempo; ese lastre de postromanticismo, que también utilizó su hermano, aunque lo más noble del poema es que el autor se desborda en humanidad con los afligidos, con los que sufren en la Carcel, “donde el pobre recluso/pasa su vida muerta…”, “emplea los procedimientos del auténtico romanticismo: muerte, silencio, sombras, tristezas, quimeras de las ciudades muertas, destacando la imagen exacta – visual y auditiva – del reloj. Imagen que inicia el poema y lo cierra…”. ***************** Mi madre, Leonor Machado Martínez, hija de Francisco Machado, me dice con total seguridad que este poema fue escrito en León en el año 1930, ciudad en la que en esas fechas estaba destinado su padre como director de la Prisión Provincial. Recuerda que la cárcel tenía la puerta principal en una plaza no muy grande y que encima de aquella un reloj sonaba al marcar las horas, “era el reloj de la cárcel”. Referencias http://www.facebook.com/note.php?note_id=115223535195123




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