A Miranda, mi nieta Haiku 4
Marzo /18/2016
#Haiku
Es como el tiempo, que plasmado en la piel, ¡se paraliza!
Suave cadencia, tibio frescor que abraza. ¡Así es mi mar! Siempre sueño con él, siempre... me pierdo en él.
Dime hermana... ¿A dónde has ido? ¿Al cielo, a las nubes, a las estrellas?
Miro al espejo más, no me reconozco y sonreí. No era yo, es una imagen que sólo me contempla.
Si perdonamos, liberamos el alma y nuestro ser. Pero sólo, si lo hacemos de verdad.
¡Brotes de amor! en esa rosa blanca, sobre mi pecho.
Amanecer de un domingo gris, lleno ¡de abrazos! ¡de despedidas!
El miedo late, golpea por doquier, escuece y arde. Irrita los sentidos, desvanece la vida.
¡Ella no sabía! que esa frustración la llevaría consigo tanto tiempo. Una inesperada y dolorosa
Nueva vida latía en su interior. Su juventud extrema, arropaba su vientre
Esa codicia... hace que cualquier reto sea pequeño.
Cae la gota sin saber su final. Turbio destino.
Ya sin aliento y al final del camino, ¡lluvia de abril!
—Acércate hijo, ven, pon tu manito en mi vientre. Aquí, mira, aquí dentro está tu he… ¿Vamos a dibujarla tú y yo? le dije dándole un beso.
Abro mis ojos, miro el amanecer. Siento el aroma de la mañana y digo: ¡desperté!, soy feliz.