Octubre/07/2018
Madrid.
#Tanka
Los sentía tan cerca, que sus corazones latían junto al mío y sus risas... sus risas
¡Qué no te mientan...! ¡Qué no todo son rosas! Tampoco espinas.
Ya sin aliento y al final del camino, ¡lluvia de abril!
Te fuiste un día, y hoy, logro recordarte ¡al fin!...serena.
Habla el silencio; tala mi soledad, y... siento frío!
Tanta nostalgia anclada en el recuerdo. Vid goteando, y el río desbocado en su frío deshielo.
Lo irrealizable, lo imaginario o lo fantástico, es una posible utopía. Para mí,
Cuando el instante, la casualidad o el amor se acoplan; entonces, viviremos, entonces, ¡Naceremos!
Canta el Jilguero en su vuelo ondulado. Son sus gorjeos tan dulces y animados que deleitan la vida.
¡Dios! me arrepiento, a ellos pido perdón, Tú, ¿me ayudaste? Fui tan frágil, tan débil sobre todo, tan sola.
No soy perfecta, la perfección no es vida. Es obsesión, y eso, ya es un defecto. ¡Errar para vivir!
Entre las ramas, rosas blancas al viento. Luego, ¡el cielo!
Esas niñas mías que tanto amé. Esa entrega incondicional y transparente,
Tengo otra esencia, lejana juventud; ¡Como el vintage!
¿Noche de estrellas, luciérnagas y luna? ¡Todas me alumbran!