epifanía de la luz en el vació.
por:
Christian Alexander Arreola Jacinto
Gasto papel mirando el sol de debajo de tu vientre,
la calavera me sonríe recordándome mi turbia suerte
que se marca tal vez en una carta de tarot vieja y empolvada.
no soy bueno,
no nací así
son esas cosas que hacen que un hombre
se torne malo…
Tengo un niño muerto en mi,
un demonio de sombras,
un hombre seco,
todo en una figura parada sola,
cubierta en la mortaja del tiempo
quieta e inmóvil en medio del yermo vació.
Temo por mi suerte
cuando en la rendija piadosa de mis ojos se sostiene
en tu mirada,
en la blanca seda de tu piel
y en cada estrella marrón cuyo mapa fulgurante dibuja
un destino aun oculto a los dioses,
la sombra cálida en la negrura espesa de tus ojos,
ese mar quieto de obsidiana abrigadora
cortado en el filo luminoso de tu sonrisa de nieve violenta y quieta.
Temo por mi suerte
en el estruendoso sonido del quiebre de mis palabras
que haces hablar en el silencio
retumbando en el vació que aborda tu ser majestuoso
haciendo del temor una nada,
de mi calavera un disparo blanco que convierte en polvo su sombra,
veo mi suerte cambiar cuando tu ser
vuelve al vació contra si mismo, consumiéndose
dejando solo el éter fulgurante,
lo intangible..
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Preferido o celebrado por...
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