Sentada en el otoño, contemplando sus colores. Con la mirada perdida más allá de… Un Azul con trazos marrones y ver… Blanco, naranjas, verdes, fucsias.…

Cuando un Alma se divide, se individualiza y hace camino, un día, en algún lugar, alza la vista y de pronto siente la flecha inesperada, ardiente, incomprendida. No lo sabe, pero ocurre...

Decidió vaciarse por dentro. Tal vez le inspiró confianza, o fue reciprocidad quizá. Intercambiaron un breve, mas profundo epistolario. Poemas, declaraciones, fantasías inconfesables, s...

Cuando recuerdo tus labios, tu sabor, tu tacto, tus besos, ¿acaso por ser vedados,

Siente. Dice. Actúa. Vuelve a sentir. Se desboca y aún así, sólo sigue s…

Mudas palabras se escuchan con miradas. Silencio cómplice de febril antojo en cuerpos y almas desnudas.

Tropezó con un beso disfrutado, un… Bastaron unos segundos de aquella… Flashes.

Las despedidas suelen ser tristes,… En la medida que pasan los años y… Cuando creo saber que un Adiós no… Luego me doy cuenta que nada es pa…

Como si me hubiesen secuestrado las sílfides y con sus sonidos me hubiesen mantenido dormida sin tiempo definido. Hasta que un día comienzo a ver una belleza indescriptible en los tonos...

Remienda los jirones que van queda… con retazos de recuerdos, como si de una escultura de pâpier… Una capa encima de otra, repetidamente, la va volviendo muy…

Para nacer, primero hay que morir. O eso creo. Morir de dolor. De Ése, que te estruja el pecho, que te asfixia la garganta

Flor no marchita en las lindes del tiempo. Resistente y frágil.

Enloquecido. Dueño y señor de todo, ruge furioso.

Un día detrás de otro. Después un mes y otro. Sucede un año a otro. Así unos cuantos. Acampada en la esperanza vana.

Contaban ya los ancestros desde el lejano Japón que fuimos entrelazados por invisible cordón. De color rojo es el hilo