Recogido por Esteban Peicovich en su libro "Borges, el palabrista"
#EscritoresArgentinos
El volumen de Locke, los anaquele… la luz del patio ajedrezado y ters… y la mano trazando, lenta, el vers… La pálida azucena a los laureles. Cuando en la tarde evoco la azaros…
¿Usted vio la última campaña presidencial? ¡Qué vergüenza! Con Carter recorriendo el país con un avión que se llama 'El Maní Volador’. ¿No es una vergüeza? Bueno, pues ha sido votado: e...
Hay tanta soledad en ese oro. La luna de las noches no es la lun… que vio el primer Adán. Los largo… de la vigilia humana la han colmad… de antiguo llanto. Mírala. Es tu…
Sin lástima y sin ira el tiempo me… las heroicas espadas. Pobre y tris… a tu patria nostálgica volviste, oh capitán, para morir en ella y con ella. En el mágico desierto
Será cuando la trompeta resuene, c… Ha sido en 1757, según el testimon… Fue en Israel (cuando la loba cla… Ocurre en cada pulsación de tu san… No hay un instante que no pueda se…
Me darás una ajena inmortalidad, c… Eres ya sombra de mi vida. Atraviesas mis noches con ti segur… La muerte –tempestad oscura e inmó… Alguien recogerá mis pasos y usurp…
En su hierro perdura el hombre fue… hoy polvo de planeta, que en las g… de ásperos mares y arrasadas tierr… lo esgrimió, vano al fin, contra l… Vana también la muerte. Aquí está…
Quiero saber de quién es mi pasado… ¿De cuál de los que fui? ¿Del gin… que trazó algún hexámetro latino que los lustrales años han borrado… ¿Es de aquel niño que buscó en la…
Hay que arrimar una escalera para… ¿Qué podemos buscar en el altillo sino lo que amontona el desorden? Hay olor a humedad. El atardecer entra por la pieza de…
El hombre llegó del sur de Inglaterra en un amanecer del invierno de 1877. Rojizo, atlético y obeso, resultó inevitable que casi yodos lo creyeran inglés y lo cierto es que se ...
Por estos rojos laberintos de Lon… descubro que he elegido la más curiosa de las profesiones… salvo que todas, a su modo, lo son… Como los alquimistas
Abarbanel, Farías o Pinedo, arrojados de España por impía persecución, conservan todavía la llave de una casa de Toledo. Libres ahora de esperanza y miedo,
¿Dónde estarán los siglos, dónde e… de espadas que los tártaros soñaro… dónde los fuertes muros que allana… dónde el Árbol de Adán y el otro… El presente está solo. La memoria
Allá por el Maldonado, que hoy corre escondido y ciego, allá por el barrio gris que cantó el pobre Carriego, tras una puerta entornada
En el bronce de Homero resplandec… negro vino que alegras el corazón… Siglos de siglos hace que vas de m… desde el ritón del griego al cuern… En la aurora ya estabas. A las ge…