(A María Kodama)
#1976 #EscritoresArgentinos #LaMonedaDeHierro
El poniente impecable en esplendor… quebró a filo de espada las distan… Suave como un sauzal está la noche… Rojos chisporrotean los remolinos de las bruscas hogue…
En las trémulas tierras que exhala… El día es invisible de puro blanco… Es una estría cruel en la celosía, Un fulgor en las costas y una fieb… Pero la antigua noche es honda com…
En el alba dudosa tuve un sueño. Sé que en el sueño había muchas pu… Lo demás lo he perdido. La vigili… ha dejado caer esta mañana esa fábula íntima, que ahora
En Buenos Aires el Zahir es una moneda común de veinte centavos; marcas de navaja o de cortaplumas rayan las letras N T y el número dos; 1929 es la fecha grabada en el anverso....
Marte, la guerra. Febo, el sol. N… el mar que ya no pueden ver mis oj… porque lo borra el dios. Tales des… han desterrado a Dios, que es Tre… de mi despierto corazón. El hado
Millares de partículas de arena, ríos que ignoran el reposo, nieve más delicada que una sombra, leve sombra de una hoja, la serena margen del mar, la momentánea espu…
Las diversas y a veces contradictorias doctrinas que llevan el nombre de la cábala proceden de un concepto del todo ajeno a nuestra mente occidental, el de un libro sagrado. Se dirá que...
Indescifrada y sola, sé que puedo ser en la vaga noche una plegaria de bronce o la sentencia en que se… el sabor de una vida o de una tard… o el sueño de Chuang Tzu, que ya…
Mi relato será fiel a la realidad o, en todo caso, a mi recuerdo personal de la realidad, lo cual es lo mismo. Los hechos ocurrieron hace muy poco, pero sé que el hábito literario es as...
Somos el río que invocaste, Herác… Somos el tiempo. Su intangible cu… acarrea leones y montañas, llorado amor, ceniza del deleite, insidiosa esperanza interminable,
Harto de su tierra de España, un viejo soldado del rey buscó solaz en las vastas geografías de Ariosto, en aquel valle de la luna donde está el tiempo que malgastan los sueños y en el í...
En Pringles, el doctor Isidro Lozano me refirió la historia. Lo hizo con tal economía que comprendí que ya lo había hecho antes, como era de prever, muchas veces; agregar o variar un po...
Alta la voz y animosa como si cantara flor, hoy, caballeros, le canto a la gente de color. Marfil negro los llamaban
Un hombre encarcelado y hechizado, un hombre condenado a ser la serpi… que guarda un oro infame, un hombre condenado a ser Shylock un hombre que se inclina sobre la…
Lo ha alcanzado una bala en la rib… de una clara corriente cuyo nombre ignora. Cae de boca. (Es verdader… la historia y más de un hombre fue… El aire de oro mueve las ociosas