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EMPATÍA

Ayer perdí el juego de nuevo, en ello el tiempo es lo menos importante, este deseo y gusto de dar y recibir se ha convertido en toda una necesidad, alguien se fue de aquí, de este lugar hacia otro más, y ahora, tratar de encontrar por más que se busque, siempre será una acción sin un objetivo claro, tal vez en vano...

Sensaciones de extrañes alimenta a mi ego, y a la vez se burlan irónicamente de mí, gritándome a la cara –te lo advertí, y sabes que paso otra vez– se suele aprender mucho de todo esto, pero nunca a como perder, aunque a veces al parecer creo hacerlo muy bien...

Y llegar a la conclusión de que esto es indispensable para mí, no fue fácil, y no para vivir, ni siquiera para ser feliz, sino para poder compartir lo que palpo aquí dentro de mí...

Y al final, ser tan sutil a la hora de decir y demostrar las cosas, no sirve de mucho, tal vez es algo tarde ya para estar al tanto de ello, y mi error quizás no merece respeto, quizás en deuda quede, quizás esto merezco...

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