POESÍA JAPONESA
Paseando por Granada llevando mi bicicleta, me quedé mirando a un perro con hechura de alambre y ojos saltones, de esos, que ponen a prueba la sujeción de sus cuencas y para rematar con...
Déjame llorar por ti hace mucho que te rompiste a mí, me dejaste rota y combatí el mundo se hundió a mis pies, pero como rocas en la mar, yo luch…
Me tomé mi dulce tiempo provocándo… mordiendo su cuello apretando su trasero arrasando sus labios sentía sus gemidos
La soledad me come, me roe, como u… come la morera, quiero gritar pero no puedo, solo susurro... dicen que si juntas mil susurros sale un alarid…
Cuando no esté no oiré la bella lluvia en mí caer. Hoy partiré en silencio, de los campos de otoño.
Ya está aquí el hermoso otoño el suelo se convirtió en una enorme alfombra de hojas rojas, naranjas, amarillas sentí como crujían bajo mis pies.
Cuando me lo dijeron me quedé paralizada. ¡no podía creerlo! ¿cómo era posible? Había Me senté, lloré, pataleé y grité. Me dieron un valium. Me tranquilicé y con la misma ropa, cogí l...
Caminaba con la mirada vacía, ese silencio mudo, parece eterno, me hundo en la profundidades del i… ¿por qué me dejó, si tanto me quer… Esa ojeada fría como el invierno,
Hay noticias que te dejan noqueada, de pronto tu vida se da la vuelta, y el miedo se instala
Arrancarme la piel a tiras sentirme morir día a día no distinguir el alba del crepúscu… dentelladas en el corazón venas largas saliendo sangre a bor…
Lo reconozco: Me enamoré así, de lejos con cincuenta mundos de distancia, los fui saltando uno a uno, allí estabas con los brazos abiert…
Seda granate como sangre que mana va deslizándose por MI cuerpo nacar muerte inmortal
Entre las páginas de un libro en mis sueños tú ya estabas ahí enterrado entre letras, palabras de perdón. Pides perdón por amarme, pides
Mi alma se serenaba en aquel lago cristalino entre rayos de sol leía un libro, el de mi vida.
Espero tu llamada mil días sentada con veinte teléfonos esperando que suene alguno. Mis piernas dormidas