POESÍA JAPONESA
Hoy no es tu día de suerte no eres capaz de mirar de frente todo lo dejas para el día siguient… hasta darme un beso que no sientes… La vida no es como la ves
Patos nadando árboles, viento, lluvia ventana se abre Rayos de luna navegan en el barco
Parecen tus pechos la risa de una estrella que se desmoronó en miles de fragmentos blancos, redondos y delicados.
Hubiese deseado que me quieras no es así, estaba toda llena de tus mentiras, dejaste mi vida perdida en un infi…
La luna negra ilumina mi ventana quiero sentirme viva tú atravesaste con una bala mi dol… abriste la puerta te fuiste sin mirar atrás.
Tengo el presentimiento de que empieza el momento entre tú y yo. Lava recorriendo mi cuerpo mis manos recorriéndolo
Déjame llorar por ti hace mucho que te rompiste a mí, me dejaste rota y combatí el mundo se hundió a mis pies, pero como rocas en la mar, yo luch…
Mis pies con diamantes brillan como las estrellas de noch… tu lengua pérfida lame, mis dedos tu mirada fija en la mía azul y miel estremecidos de placer…
Estoy en casa esperándote dime: ¿vendrás sin tener que pagar… Hoy en día todo se cobra, todo se… pero solo tengo mis demonios correteando entre la nieve
Quise aprender a volar sin alas y me salieron agujetas en el alma, sacrificio inútil que hice por hui… de esta realidad donde el morado es el color favorito.
Horas de papel ilusión tatuada y piercings refulgiendo a medianoche, una cerveza en el garito con luces de los setenta de neón.
Entre las páginas de un libro en mis sueños tú ya estabas ahí enterrado entre letras, palabras de perdón. Pides perdón por amarme, pides
Se oyó un taconeo en el silencio de la iglesia, una mujer avanzaba hacia los primeros bancos, llegó al primero, se arrodilló, agacho la cabeza, no se oía nada, pero sus labios se veían ...
Radiante el día transcurre en una suerte de saudad… rayos de sol entran por los visill… iluminando mis piernas largas, entreabiertas y anhelantes.
Sube la temperatura en la habitaci… la cintura apretada, apenas puedo… él que no me deja ni un segundo de… tanto que muero lo tengo que empuj… ¡necesito oxígeno! O me voy a desm…