Y un día entre los días ¿qué miste… con un golpe certero te arrojará, en deporte de trasmun… que te aguarda, oh pelota lanzada…

La voz del mar es un clamor de fur… de paroxismo. En el temblor del ag… con espasmos de amor y de lujuria, tal vez un mito divinal se fragua. Líquidas trallas baten los cantile…

¡Oh genio del lugar que nos acecha… llegúense sin recelo a ti las alma… porque, en signo de paz, todas tus… clavaste en tierra y se han trocad…

Hoy es el barco potro que galopa. Tasca el freno y albea la espuma a… La cola barre el mar, tendida tras… como una estela sobre el mar cobal…

Han venido los húngaros, hermana, osos de tardo andar, monos ladinos lleva la miserable caravana. Son los hombres esbeltos y cetrino… Fuman pipas enormes. Llevan rojos

Agua y nubes no más, y en el espac… la luz, suprema fantasmagoría. ¿Quién pudo levantar ese palacio para un dios, para un cielo, para…

para una plaza colonial ¡Claxon, silencio! ¡Chitón, tráfico. ¡Detente, oh vida! Que aún está en este rincón la vieja España dormida.

Ardes con el cohete del cielo, con… de la grúa y la carga y el disco e… Ardes, oh Nochebuena, sin Niño y… sin otro frío que el de un alma so…

Tez de nácar, azules ojos, rubios… todo el ardor del trópico se vuelv…

Morelia... ¡Qué quietud! ¡Cuánta… ¡Qué larga paz en tus jardines lat… Tu viva historia es ya leyenda pur… Queda su encanto en ti como perdur… el sabor de los frutos en el ate.

Triunfan en tu cuerpo todos los pe… Son tus labios rojos flores de men… Son simas de orgullo tus ojos rasg… Tus palabras roncas, torrentes de… Tenazas de gula son tus dientes bl…

Todo lo envuelve tu oriental molic… y en este mar que te acaricia, mir… ya no profundidad, ya no zafiro, sino jade, impureza y superficie.

temprano ¡Champañas en el mar!... Y tenues… para ocultar hasta el postrer inst… un conciliábulo gigante de rascaci…

Rauda la carretera se desliza y el coche tiembla con los vivos r… de un vaporoso traje de mestiza y un oblicuo relámpago de ojos

¡Señor, a tus designios me someto! Mi deber de hombre honrado cumplí, y aguardo, quieto, lo que hayas decretado. ¡Contigo, junto a ti, del diestro…