#EscritoresArgentinos
No soy quien escucha ese trote llovido que atraviesa mi… No soy quien se pasa la lengua ent… al sentir que la boca se me llena… No soy quien espera,
La calle pasa con olor a desierto, entre un friso de negros sentados sobre el cordón de la vereda. ¡Calor! ¡Calor! El candombe le...
Solo, con mi esqueleto, mi sombra, mis arterias, como un sapo en su cueva,
Lo no moroso al toque el consonar a qué la sexta nota los hubieron posesos los sofocos del bis a bis acoplo d… los erosismos dérmicos
Demasiado corpóreo, limitado, compacto. Tendré que abrir los poros y disgregarme un poco.
¿Me extravié en la fiebre? ¿Detrás de las sonrisas? ¿Entre los alfileres? ¿En la duda? ¿En el rezo?
El uno total menos plenicorrupto nones consentido ape… que al ido tiempo torna con sus ca… El uno yo subánima aunque insepulto intacto bajo sus…
Con frecuencia voy a visitar a un pariente que vive en los alrededores. Al pasar por alguna de las estaciones —¡no falla ni por casualidad!—el tren salta sobre el andén, arrasa los equi...
¿Nos olvidamos, a veces, de nuestra sombra o es que nuestra sombra nos abandona de vez en cuando? Hemos abierto las ventanas de siempre. Hemos encendido las mismas lámparas. Hemos subi...
¿Surgió de bajo tierra? ¿Se desprendió del cielo? Estaba entre los ruidos, herido, malherido,
La noche, navegando como ayer, como siempre, por aguas de silencio, de calma,
Ay mi más mimo mío mi bisvidita te ando si toda así te tato y topo tumbo y te arpo
¿merezco su presencia? ¿Me sacaré el sombrero? . Bien plantado en la tierra, las nubes se enmarañan en sus duro…
Douarnenez, en un golpe de cubilete, empantana entre sus casas corrió dados, un pedazo de mar,