#EscritoresMexicanos
Me duele esta ciudad, me duele esta ciudad cuyo progreso… como un muerto invencible, como las espaldas de la eternidad… Me duelen todos ustedes que tienen…
Recomenzando siempre el mismo disc… el escurrimiento sesgado del discu… la persecución, la prosecución y e… Aguardando siempre la misma señal, el aviso del amor, de peligro, de…
No era necesaria una nueva acometi… para que lo supiera. Navegaba la mar por un rumbo desco… Donde el amor moró y tuvo reino queda ya sólo un muro que avasalla…
Puse las manos donde mis guantes q… puse el rostro donde mi antifaz po… mi única hazaña ha sido no ser ver… mirar sin aspavientos mi existenci… rodeada por lo que tiene de centro…
Tal vez retornan aquellas imágenes… abrimos la caja de cristal y tomam… primeros espejos ocultos allí, y acariciamos temblado los labios… atrapada por aquel irresistible de…
A veces tu ausencia forma parte de… mis manos contienen la lejanía de… y el otoño es la única postura que… A veces te descubro en el rostro q… a veces es una calle al anochecer…
un gancho de hierro y se jala, su expansión lo desmiente al subir el agua que lo chorrea lo
Lo empiezas a saber, tu amor va enseñando sus sales de… a veces, el esqueleto de tu ángel… baila en tus ojos, ciertas avecillas silvestres amane…
Porque tú eres puente, porque tú e… ansiada buscadora de aquello que e… eres el refuerzo con que amanece, eres la luz del mar entregada a su… absorta en el eco de su belleza.
Cada uno debe entrar en su propio… haciendo sus abstinencias más incl… porque la luz debe romperse allí,… Recuerden la niñez de vuestra madr… solitarios del mundo y de todos lo…
Para que el Paraíso Perdido pueda… y la Historia se desprenda como un… es necesario tomar este escenario… Consideremos, por principio, la tr… Más allá de la lluvia, los árboles…
Este cuerpo que yo acaricio lentam… este cuerpo donde yo he penetrado… en mi sofocamiento de sombra. Este vientre donde el amor abarca… estos senos donde la luz altera lo…
Basta morir como una lámpara desde… como el rescoldo de una brisa ters… para morir, para suministrarnos la mano venidera del olvido; basta decirle no al día de mañana,
Hoy llueve, es tu primera lluvia, el abismo deshace su rostro. Cosas que caen por nada. Vacilaciones, pasos de prisa, atropellamientos, crujido de muebles que cambian de sitio, collares...
A Héctor Raúl Valero