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- LA DEJARON SOLA -

Entre mis manos las suyas
en mis lloros sus sollozos,
confiesa tenía joyas
fueron cuatro, aquellos mozos.
 
Vieja, no acierta entender,
no hay casa, ni puerta abierta,
un orillo pretender
donde quede bien cubierta.
 
Me quede sin comprender
la congoja de la anciana,
cruel aquel mal proceder
de ellos siempre fue guardiana.
 
Sin decirle la misión
busqué algunos de sus hijos,
con honda desilusión
torne a darle mis cobijos.
 
Casa hogar de muchos
de aquellos en abandono
pasillos un poco estrechos
para una madre su trono.
 
Domingo 23 de marzo de 2014
 
 
-   CARMEN SOCARRAS -
 
A mediodía del domingo, como de costumbre fui a rezar
pasando por esa puerta, la escuché sollozar
le dije que te duele, en que te puedo ayudar?
Acompáñeme un ratico, solo quiero conversar…
 
En el banco de su lado pronto me acomodé
entre las suyas mis dos manos, con ella también lloré,
un médico, un comerciante, una dama con hogar
hacen parte de la estirpe, de Carmen Socarras.
 
En sus años productivos, el dinero no faltó
trabajaba en las cocinas, también se le explotó
pero no dejó a sus hijos sin pan ni educación,
hoy ellos la descuidan en la casa del portón.
 
El dinero no alcanza para tanta obligación
ella JODE y no aguanta a la señora del doctor,
así me lo dijera el hijo que pario
esta pobre viejecita, que conmigo....también lloro.
 
 
A Mis amigos más queridos, les quiero responder, pero cada vez que de ella escribo las lágrimas no me dejan ver.
 
 
Madusa

CARMEN SOCARRAS es la prolongación de LA DEJARON SOLA. por solicitud de algunos amigos para que ampliara mas el poema.

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