Hoy sentí, como el mar sentí,
se balanceaba en mí.
Y mire al horizonte gris
y me perdí ahí.
Y no quise buscar mi sombra,
y no quise encontrar mis pasos.
Y me quede, ahí.
Hoy pinte en un muro sin fe,
lo que nunca escribí.
Me aferre al borde de un balcón,
bese la eternidad.
Y pegue un grito en el cielo
con la rabia de mis anhelos,
que no encontré, ahí.
Hoy cante una canción azul
y pude respirar.