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Centro de vida

Donde tantos amantes grabaron su amor...
Kiosco central; testigo de la mentira del 'para siempre’. Hogar nocturno para los lisiados de la vida. Tan solitario...

Es otoño y es Jueves, la lluvia de roji-verdes te envuelve, acarician cada columna que te detiene para que tú no caigas, como esas palabras dichas al viento de tu eco.

Tienes unas cuantas grietas ya, las del tiempo que trae consigo el desamor. Rodeado de blancos, que alumbran tu camino casi inerte... Luces gris pardo, te ves tan triste, tan solo, parece que ya no hay amantes locos de visita y en tus paredes se lee la consigna de olvidado...
Debo ser yo, la única que aún cree en el amor, pues aquí estoy, a tus pies, bajo éste cielo de luto y la luna inquieta, en el frío señuelo que ofreces de consuelo...
Víctima de pasión; ¿así nos dejó la ilusión?...
Te ves lastimado y la humedad te carcome, ¿son todas esas lágrimas que te han llorado?, las que parecen estar en eterna guerra con tu piel por volverte más gris.

Es de noche y sigo aquí. Hoy tampoco vi a mi amor, ni tenía esperanzas, por ello vine, para leerte unas palabras en voz alta, para mirar tus letras y sentirme amada.
Todos los recuerdos que en ti aguardan, todas las promesas cumplidas y también las rotas que reclaman tu existir.

Aquí me tienes para siempre; en tu libro existencial; en donde habitan tantas historias sin contar...
Me has visto llorar cientos de veces, pero no cedes, pero no caes, ni con el pasar del tiempo ni con el rozar del viento..
Y bien sabemos, que el tiempo pesa y el viento corre pero, nunca sabe a donde ir.

Extrañamente vengo a ratos, sólo cuando necesito de esperanzas, porque a ti, ni el amor ni el tiempo te derriba...

(2014)

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