#EscritoresArgentinos
Las vertientes las órbitas han per… el olvido su máscara de tapir no v… el gusto el gusto el cauce sus eng… las fluctuantes paredes donde aman… su corola los muslos los tejidos l…
Solo, con mi esqueleto, mi sombra, mis arterias, como un sapo en su cueva,
La noche, navegando como ayer, como siempre, por aguas de silencio, de calma,
Es una intensísima corriente un relámpago ser de lecho una dona mórbida ola un reflujo zumbo de anestesia una rompiente ente florescente
Este clima de asfixia que impregna… de una anhelante angustia de pez r… Este hedor adhesivo y errabundo, que intoxica la vida y nos hunde en viscosas pesadillas…
Llorar a lágrima viva. Llorar a chorros. Llorar la digestión. Llorar el sueño. Llorar ante las puertas y los puer…
El 31 de febrero, a las nueve y cuarto de la noche, todos los habitantes de la ciudad se convencieron que la muerte es ineludible. Enfocada por la atención de cada uno, esta evidencia,...
Costas rompientes del entonces resacas subvivencias que arenan el ahora calas
«Las mujeres cuestan demasiado trabajo o no valen la pena. ¡Puebla tu sueño con las que te gusten y serán tuyas mientras descansas! »No te limpies los dientes, por lo menos, con los se...
mi lubidulia mi golocidalove mi lu tan luz tan tu que me enluci… y descentratelura y venusafrodea
Nada de nada; es todo. Así te quiero, nada. ¡Del todo!... Para nada.
Entre un bosque de mástiles, y con sus muelles empavesados de c… Chioggia fondea en la laguna, ensangrentada de crepúsculo
En la sed en el ser en las psiquis en las equis en las exquisitísicas respuestas
Eh vos tatacombo soy yo dí no me oyes
Nada ansío de nada, mientras dura el instante de etern… cuando no quiero nada.