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El niño se sonreía
—mano inhábil, ojo atento­
y la cometa en el viento
(su corazón) se cernía.
Ave, cometa, de un día
su corazón soñoliento.
Pues el corazón quería
huir —pero no podía,
pero no sabía­ al viento.
Preferido o celebrado por...
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