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Sólo me quedótu ombligo como una taza redonda.Francisco Urondo

Cuando el fulano se miraba el ombligo
no era por narcisismo o complacencia
sino porque ahí siempre vio colinas
nubes convexas / constelaciones
abismos caóticos y jubilosos
grillos / calandrias / cachorros de puma
 
cuando el fulano se miraba el ombligo
no era porque se creyese el centro del mundo
sino porque allí evocaba pompas de ocio
cómodas profecías con vista al mar
terrazas de crepúsculo a fuego lento
pinos espeluznados / vientos espeluznantes
 
hoy cuando el fulano se mira el ombligo
no es porque se sienta presuntuoso
sino porque allí escucha los mejores pregones
coros de rameras que ascienden al cielo
carillones con horas al mejor postor
ecos de moribundas primaveras
 
lo cierto es que el fulano mira su ombligo
por él desciende al mundo / sube al vuelo
pero sólo lo asume con alborozo cuando
le trae nostalgia onfálica de su linda mengana
cuyo pozo de sueño le acerca más delicias
que el ombligo de venus que medra en los tejados.
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