Yo no te culpo a tí de que la vida nos marque dos caminos tan opuesto… No me culpes a mí de las heridas

Bendito sea el sello de los sobres de las cartas que llegan a tus man… la sopa del cocido de los pobres, la ropa que te quitan los veranos. Benditos sean los gordos maricones…

Tus pies bailan un tango con mi pa… tus cejas son las rejas de una pri… tus labios son el fuego por duplic… tu olvido es un descuido de mi pas… Tu cuello es una rama para colgars…

Tenía los pies diminutos, Y, unos, ojos, color verde marihua… A los catorce fue reina del instit… El curso que repetí, Las del octavo derecha dijeron:

Ni imploro tu perdón ni te perdono… ni te guardo rencor ni te respeto, si tardo en devolverte el abandono repróchaselo al tono del soneto. Rompe la veda, ensánchate, respira…

Mirando en el retrovisor los semáforos del miedo. Ando buscando un alquiler un cuarto de pensión. una canción capaz de hacer

Cuando no queda nada ya mejor que… y entrar en cualquier bar y pedir… y volver a largarse sin haberlo ac… y odiar a las parejas que salen de… Las siete de la tarde, quisiera es…

A ti que te enfurruñas con mis bro… hija de anciano bardo inevitable, candidata a heredar mis cromosomas… polizón de un por fin ingobernable… A ti que me arruinas con percebes,

Caballero, en edad de merecer Con un pelo de tonto, cuatro canas… El pasado resuelto y muchas ganas Ya sabe usted de qué Informal, ilustrado, manejable

Llegó con su espada de madera y zapatos de payaso a comerse la ciudad. Compró

Llega al atardecer con su cartera, viste de oscuro, calla por los cod… mi modo de querer, sin malos modos… rezuma savoir faire a su manera. Siempre estamos de acuerdo en casi…

No soporta el dolor, le divierte i… que vive lejos, en un raro país, cuando viaja en sueños lo hace sin… cada vez que se aburre de andar da un salto mortal.

Maldita sea la voz de la experienc… que nunca se equivoca a media suma… los que firman la paz con su conci… los oiga, que en mi taxi no se fum… los energúmenos que se encabritan,

Yo no quiero un amor civilizado, con recibos y escena del sofá; yo no quiero que viajes al pasado y vuelvas del mercado con ganas de llorar.