Ipsius despectione.
Pellem pro pelle,
et cuncta quæ habet homo dabit pro anima sua.
Sus labios sangrientos me han depravado;
y de noche componen unos versos
itifalóforicos y ragálericos
¡Labios abracadabrantescos
besadme el alma, que sea drenada!
Pero Caro Satán,
cuando se sequen mis ojos gargálicos
¿cómo reír, oh corazón barbárico?
Vendrán con sus coros báquicos;
cuando se iluminen mis ojos gargálicos
¿me dolerán esos sobresaltos espasmáquicos?
yo, el del alma en risas.
Cuando se agoten sus pupilas mefistofélicas
¿podré vivir, oh corazón barbárico?
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