#EscritoresAndaluces #EscritoresEspañoles #Generación27
¡Amor!, gritó el loro (Nadie le contestó de un chopo al… ¡Amor, amor mío! (Silencio de pino a pino.) ¡Amooor!
Yo te arrojé de mi cuerpo, yo, con un carbón ardiendo. —Vete. Madrugada. La luz, muerta en las esquinas
Entro, Señor, en tus iglesias...… si tienes voz, ¿por qué siempre va… Te lo pregunto por si no sabías que ya a muy pocos tu pasión redim… Respóndeme, Señor, si te deprime
¡Jee, compañero, jee, jee! ¡Un toro azul por el agua! ¡Ya apenas si se le ve! —¿Quééé? —¡Un toro por el mar, ¡Jee, compa…
Si Garcilaso volviera, yo sería su escudero; que buen caballero era. Mi traje de marinero se trocaría en guerrera
Un sueño sin faroles y una humedad… pisados por un nombre y una sombra… No sé si por un nombre o muchos no… si por una sombra o muchas sombras… Reveládmelo.
No los creáis, cubría su rostro la misma máscara. La lealtad en la boca, pero en la mano una bala. Al fin, los mismos en Chile
Hoy las nubes me trajeron, volando, el mapa de España, ¡Qué pequeño sobre el río, y qué grande sobre el pasto la sombra que proyectaba!
Buscad, buscadlos: en el insomnio de las cañerías olv… en los cauces interrumpidos por el… No lejos de los charcos incapaces… unos ojos perdidos,
Es cuando golfos y bahías de sangr… coagulados de astros difuntos y ve… inundan los sueños. Cuando golfos y bahías de sangre atropellan la navegación de los le…
No quiero, no, que te rías, ni que te pintes de azul los ojos, ni que te empolves de arroz la car… ni que te pongas la blusa verde, ni que te pongas la falda grana.
¡Nostalgia de los arcángeles! Yo era... Miradme. Vestido como en el mundo, ya no se me ven las alas.
Si el aire se dijera un día: —Estoy cansado, rendido de mi nombre... Ya no quie… ni mi inicial para firmar el bucle del clavel, el rizado de la rosa,
Hoy las nubes me trajeron, volando, el mapa de España. ¡Qué pequeño sobre el río, y qué grande sobre el pasto la sombra que proyectaba!
Para algo llegaste, Altair, desce… de tu constelación en pleno día. Nunca bajó una estrella a enramarse del sol de los olivos, ni la cal de los pueblos