De Amar y Pensar
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En el corazón de los valientes, existe el temor pero el coraje, no abandona el lugar, que se ha ganado.
Fue en la Sierras de Ongamira en el Valle de Punilla, tierra de la pequeña Puna donde abunda la grandeza, ungidos con fortaleza
El miedo arengaba presuroso, a sus fieles y miedosos seguidores… *Cuidado, no reclamen lo que es ju… no se opongan al poder de los peda… dejen que se abusen, ellos pueden,
Que distinción es para el Coreuta… poder cantar el Aleluya. la Misericordia se asoma y enaltec… la Paz silenciosa se apersona, la Calma no se siente aborrecida,
Tu eres la Luna, amiga inseparable, hermana de los mares, señora del amor, Reina entre las estrellas,
Eran los comienzos de la década de los 70 y en la calle Florida, frente a la cartelera del antiguo edifico del diario La Nación, una cantidad de transeúntes, algunos habitué, discutían ...
“Cuando el miedo se transforma en el personaje principal de nuestro acontecer y proceder, sin imaginarlo, caemos en manos de los violentos, de los abusadores y de los que al promoverlo ...
Mi abuela me contaba algunas cosas… y al hacerlo trasmitía su esperanz… Me contó de su llegada a la Argen… de lo duro que había sido la nosta… de lo mucho que agradeció de una v…
Cuanto derroche Neruda... Cuanto… cuantos vuelos ensayan tus palabra… no hay mujer que no sueñe con tus… ni hombre que no envidie tus entra… Cuanta misericordia para sobrepone…
Desde el centro de la esencia, desde la cavidad interior, con latidos, corazón, nos demuestras tu presencia. Hay latidos del amor,
Si mis versos consideran ser burdos,tristes y abstractos, complacientes monigotes, del arte fino o mundano, A mis versos, les advierto,
Las voces de Universo, recorren cuerpos y almas, sonoridad espiritual, que a veces sobra y alcanza, y otras veces llegan tarde,
Viejo reloj de pared objeto de mi memoria con tus listones oscuros y tus vidrios tan transparentes y ese andar tan displicente,
Ocultaron sus rosales por el temor a la guerra, y al ver los niños en guerras, las rosas se marchitaron. Esto ocurre a cada rato,
En mi Alma tengo heridas, sin zurcir; sin embargo las caricias