No importa que no sea nada para ti, para esta gripe, soy una celebridad. El puerto de sus angustias, su habitación amada, la inspiración. En cada estornudo, me voy olvidando de tus ojos...
Antes de hablar mal de mí, hombre,…
Los árboles, parecen muertos sin voz, ni tiempo ni calma. se mueven al compás del viento, son las tumbas de los pájaros sus ramas vacías, dibujan verdes
Hace varios otoños, que solté el único globo lleno de aire y suspiros que quedaba en mi mano. Se perdía suave y dócil
Tengo un poco de soledad, que Dios viste de horizonte, y adormece con milagros, el espíritu preciso, del poema. María Cayo.
Pregunto a tu cuerpo, la palabra insinuante, y busco con la lengua el sinónimo preciso que extraiga los a b c
Era un viaje extraño, mis pupilas dilatadas observaban cada gota: de sangre y de agua. Y caminé por dentro,
Siempre sospeché que tu beso era incierto, que detrás de tus palabras húmedas y en movimiento, sólo existía la nada. Una noche, tus ojos parecían alimentarse de los rayos de luna que ca...
No soy la muñeca fitness, ni que usa altos los zapatos puedo dormir hasta mañana y llegar tarde a todos lados. A veces, hubiera preferido
De la piedra, no saldrá el sonido… ni de los bosques, un suspiro. Es necesario despertar a medio sue… y observar la necesidad del fuego, para ser luz o cenizas.
Aún en el recóndito, trágico, vil. inhumano, frío espacio pequeño en que todo parece desdichado. y la secuencia de todos los suspir… se esparcen en el suelo húmedo
Él se anida en mis noches, al final de los ojos cerrados me encuentro a su lado, y borro los días más tristes dibujo luciérnagas en el aire,
El solemne vuelo del que huye el s… la realidad tallada de pasado, de… y esparcir la noche en la nada, si… allí, donde se origina lo que no t… María Cayo.
No era la inteligencia callada ni la temperatura de tus manos no recuerdo ninguna palabra no fue tu nostalgia, ni tu gato (olvidado en algún ropero)
Abrazo los árboles amputados para reescribir tu nombre en un bosque simulado de verde, piso la hojarasca salvaje encuentro un beso despidiéndose