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#EscritoresChilenos
Imposible que la luna le quite al sol su carrera. Más imposible será quitarme de que te quiera. Quitarme de que te quiera
Se juntan dos palomitos en el árbol del amor; fin de la separación que los tenía contritos. Brillaba con sus rayitos
Ya me voy a separar apiádate, corralero, pero tú, precioso cielo, me has pagado con vengar. Yo tengo seguridad
Estaba la mora, estaba, entre la paz y la guerra con su dos hijas queridas Blanca Flor y Filumena. El duque don Bernardino
Qué palabra te dijera que llegue a tu corazón con la fuerza que al enfermo lleva la muerte su voz, reinando sobre lo humano
Ajay, soy como la mariposa, ajay, soy como la mariposa, ajay, que anda alre-
Una naranja me dieron, a mi dos me la quitaron, entre tres la arrebataron, cuatro por mí se opusieron, cinco la vida rindieron,
Ya llegó tu medio amante que medio andaba perdido. Medio te viene a buscar porque medio te ha querido. Medio arrepentido vengo.
Anoto en mi triste diario: «Restaurán El Tordo Azul». Allí conocí a un gandul de profesión ferroviario. Me jura por el rosario
Anoto en mi triste diario: Restaurán El Tordo Azul; allí conocí un gandul de profesión ferroviario; me jura por el rosario
El lunes por la mañana saliendo a pasear Ines me encontré con la inhumana y dije postrado a sus pies: Señorita, si me admite
Por este joven que baila me castigo en un convento y la niña que se vaya al séptimo regimiento. Para qué le digo más.
Un bergantín velero los mares cruza con rapidez, no le temo al madero para postrarme niña a tus pies. No me hagas más sufrir
Huyendo voy de tus rabias temiendo de tus enojos, llorándote a cada instante cansados traigo los ojos. Cansados traigo los ojos
Tanta naranja madura tanto limón por el suelo, tanta niña tan bonita tantos jóvenes solteros. Tanta naranja madura