Escrito el 26 de Junio del 2019.
Un grito armónico ruega hacer algo de interés, y suena, y suena otra vez; sólo el oxígeno llega. Ante eso, el sonido entrega
Eres otro lenguaje, uno de ojos, sonrisa, lentes, voz, tan precisa para causar un viaje carente de equipaje
Madre, esto no saldrá de mi gargan… porque me enseñaste a ser más de t… que de voz. Tú desconoces el pacto que tengo, donde mi saliva aguanta resentida para salir derecha.
Igual que yo otro se inspira en ella ¿Qué sentirá él?
En ustedes recae cualquier verso, estrofa y poema, por la inherente voz que conceden a lo que se sient… o se piensa. ¿Será que en el rever… de ustedes se limita otro universo…
Sumo, resto, multiplico, divido, registro mis defectos y mis dones, mis penas y alegrías, mis razones y sentimientos, todo lo que he sid… todo lo que seré, todo lo mido
¿Cómo pretendes que te olvide? Tu nombre es para que subraye, mi lápiz quiere que te raye y ya comprenda cada espacio. Mi suspiro no se decide
Hora es de convertir la poesía en lo que siempre tuvo que haber s… desde que el lector genera sentido en una obra donde sólo existía el sentido que yo le daba, ¿había
Pido disculpa para cada chance que tuve, y no le di destinatario. Me volví en un consciente solitari… cuyo constante callar fue el perca… de no tener ni a quien dar un salu…
El horizonte enseguida se esconde. Mis manos ya no producen tsunamis impactantes en los dedos. Mis dedo… establecen un silencioso dónde sin un cómo. Un hábitat de origami…
No logro dar contrato a despegar mi pecho del tuyo, sin derecho ni obligación a un rato más, uno más de grato,
Me enamoré de simples consonantes, vocales y emoticones danzantes del baile del “te amo”. Con tus fa… zapatillas y mallas al desgaire y tu tutú hipócrita, y un leotardo
Buen instante al renacer otro invi… para medir mi paso por la cumbre. Cuando respondo gracias (por costu… al “feliz cumpleaños” no discierno mi felicidad, ¿qué tanto gobierno
La vida trata de no cambiar las velas, sino el pastel.
Tomé un esquema de mayor de mi tarea de contabilidad, esa hoja que se arrepiente de contener cantidades irreales, y errores hechos números. Leí la primera cuenta, “Bancos” con un abono ...