Fábula
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El autor a sus versos. Fieras, aves y peces corren, vuelan y nadan, porque Júpiter Sumo a general congreso a todos llama.
Poco antes de morir el corderillo lame alegre la mano y el cuchillo que han de ser de su muerte el ins… y es feliz hasta el último momento… Así, cuando es el mal inevitable,
Entre sus fieras garras oprimía Un Tigre a un Caminante. A los tristes quejidos al instante Un León acudió: con bizarría Lucha, vence a la fiera, y lleva a…
De la rama de un árbol un carnero degollado pendía; en él a sangre fría cortaba el remangado carnicero. El rebaño inocente,
El único sobreviviente de un naufragio fue visto sobre una pequeña isla inhabitada. El estaba orando fervientemente, pidiendo a Dios que lo rescatara, y todos los días revisaba el horiz...
El tiempo, que consume de hora en… los fuertes murallones elevados, y lo mismo devora montes agigantados, a un raposo quitó de día en día
¿A qué pena condenas a tu brazo, bárbaro ejecutor de tal porrazo?" “Al que obra con malicia, le respondió el varón prudentement… rigorosa justicia
Vivía en un granero retirado un reverendo búho, dedicado a sus meditaciones, sin olvidar la caza de ratones. Se dejaba ver poco, mas con arte;
Un burro cojo vio que le seguía un lobo cazador, y no pudiendo huir de su enemigo, le decía: «Amigo lobo, yo me estoy muriendo; »me acaban por instantes los dolor…
Estaba un ratoncillo aprisionado en las garras de un león; el desdi… en la tal ratonera no fue preso por ladrón de tocino ni de queso, sino porque con otros molestaba
Marramaquiz, gran gato, De nariz roma, pero largo olfato, Se metió en una casa de Ratones. En uno de sus lóbregos rincones Puso su alojamiento;
Mustafá, perro viejo, Lebrel en montería ejercitado, Y de antiguas heridas señalado A colmillo y a cuerno su pellejo, Seguía a un jabalí sin esperanza
A un buen cojo un descortés insultó atrevidamente. Oyolo pacientemente, continuando su carrera, cuando al son de la cojera
Perseguía un caballo vengativo a un ciervo que le hizo leve ofens… mas hallaba segura la defensa en su veloz carrera el fugitivo. El vengador, perdida la esperanza
Cantando la cigarra pasó el verano entero sin hacer provisiones allá para el invierno; los fríos la obligaron