#1979 #Cotidianas #EscritoresUruguayos
¿Qué remoto corpúsculo de amor se abrirá paso entre las fobias de… ¿llegará como pájaro aterido? ¿como nube moribunda de lluvia? ¿como rayo sin trueno?
¿Te importa mucho que dios exista? ¿te importa que una nebulosa te di… ¿que tus oraciones carezcan de int… ¿que el gran hacedor pueda ser el… ¿que los torturadores sean hijos d…
Voy a cerrar la tarde se acabó no trabajo tiene la culpa el cielo que urge como un río
La noche fácil y aparentemente sag… o mejor dicho el abismo de la noch… no es como otros abismos tiene fondo su tálamo de niebla o relente o fa…
Si a uno le dan palos de ciego la única respuesta eficaz
Poco a poco se fueron convenciendo de que habían convencido pero el silente dijo no o sea no consiguieron cambiar la imagen
La verdad es que grietas no faltan así al pasar recuerdo las que separan a zurdos y diestro…
Nadie sabe en qué noche de octubre… de fatigados duendes que ya no ocu… puede inmolarse la perdida infanci… junto a recuerdos que se están hac… Qué sorpresa sufrirse una vez deso…
La muerte se puso una cara de mons… una cara de monstruo horrible esperó y esperó detrás de una esqu… salió al fin de la sombra como un… y el niño huyó más rápido que su p…
Quién iba a prever que el amor, es… se dedicara a ellos tan formales mientras almorzaban por primera ve… ella muy lenta y él no tanto y hablaban con sospechosa objetivi…
No llueve hace ya meses que no llueve los pastizales y los bosques arden cuando los roza el fósforo del sol también los corazones están secos
A sus treinta y cinco años, Ileana Márquez tenía marido (Dámaso) y amante (Marcos). Saberse querida, o al menos deseada por ambos, no le causaba la menor ansiedad, más bien le otorgaba ...
Aliiiirio. Aliiiirio Bengoa. Demasiado clamor para ser escuchado a las siete y media de la mañana. Pero allí está el hombre, agitando los brazos desde la vereda de enfrente y gritando A...
Falta saber el último sentido, quiero decir: si es pueblo o es im… Cada noticia con su desmentido, cada desolación con su misterio. Claro, cuando el misterio es de me…
Llegan de atrás pero no importa son nuevas en verdad alentadoras marx se sabía su shakespeare de me… y el che sentía latir