#EscritoresMexicanos
Voces al doblar la esquina voces entre los dedos del sol sombra y luz casi líquidas
Como el aire hace y deshace sobre las páginas de la geología, sobre las mesas planetarias, sus invisibles edificios:
El mediodía alza en vilo al mundo. Y las piedras donde el viento borr… tiempo, las torres que al caer la tarde in… la nave que hace siglos encalló en…
No es el viento no son los pasos sonámbulos del ag… entre las casas petrificadas y los… a lo largo de la noche rojiza Todo está quieto
El libro el vaso el verde obscuramente tallo el disco lecho de la bella durmiente la mús…
Si tú eres la yegua de ámbar yo soy el camino de sangre Si tú eres la primer nevada yo soy el que enciende el brasero… Si tú eres la torre de la noche
La mirada interior se despliega y… soles azules, verdes remolinos, pi… tornasol solitario, ojo de oro gir… bosques de cristal de sonido, bosq… ¡viento, galope de agua entre los…
Sobre las aguas, sobre el desierto de las horas pobladas sólo por el sol sin nombr… van los maderos tristes, van los hierros, la sal y los carb…
Hora nula, cisterna donde mi pensamiento a sí mismo se bebe. Por un instante inmenso he olvidado mi nombre.
Los labios y las manos del viento el corazón del agua un eucalipto el campamento de las nubes la vida que nace cada día
En el azul unánime los domos de los mausoleos −−negros, reconcentrados, pensativ… emitieron de pronto pájaros.
En las montañas Nilgiri busqué a los Toda. Sus templos son establos cónicos. Flacos, barbudos y herméticos, al ordeñar sus búfalos sagrados
Mis pasos en esta calle Resuenan en otra calle donde oigo mis pasos
Aquel joven soldado era sonriente y tímido y erguido como un joven durazno. El vello de su rostro se doraba con el rubor de los duraznos
Ojos medulas sombras blanco día ansias afán lisonjas horas cuerpos memoria todo Dios ardieron todos polvo de los sentidos sin sentido ceniza lo sentido y el sentido