#EscritoresMexicanos
Considera, alma mía, esta textura Áspera al tacto, a la que llaman v… Repara en tantos hilos tan sabiame… y en el color, sombrío pero noble, firme, y donde ha esparcido su res…
Me tendí, como el llano, para que… Y fui una noche entera ámbito de su furia y su lamento. ¡Ah! ¿quién conoce esclavitud igua… ni más terrible dueño?
Como la cera blanda, consumida por una llama pálida, mis días se consumen ardiendo en tu recuerd… Apenas iluminas el túnel de silenc… y el espanto impreciso
Déjame hablar, mordaza, una palabr… para decir adiós a lo que amo. Huye la tierra, vuela como un pája… Su fuga traza estelas redondas en… frescas huellas de aromas y señale…
A veces, tan ligera como un pez en el agua, me muevo entre las cosas feliz y alucinada. Feliz de ser quien soy,
El sitio que dejó vacante Homero, el centro que ocupaba Scherezada (o antes de la invención del lengu… en que se congregaba la gente de l… para escuchar al fuego)
Solo la voz, la piel, la superfici… pulida de las cosas. Basta. No quiere más la oreja, qu… rebalsaría y la mano ya no alcanza a tocar mas allá.
Cuando nos lo anunciaron los que v… los que llevan el mar ausente entr… en forma de sencillos caracoles, temblamos de alegría, como bajo el… el pétalo colmado de las flores.
Matamos lo que amamos. Lo demás no ha estado vivo nunca. Ninguno está tan cerca. A ningún… un olvido, una ausencia, a veces m… Matamos lo que amamos. ¡Que cese…
Sentadito en la sombra —solemne con tu bocio exoftálmico;… (en apariencia, al menos, debido a… de los párpados); frío, frío de repulsiva sangre fría.
VII He aquí que la muerte tarda como e… Nos va invadiendo, lenta, poro a p… Es inútil correr, precipitarse, huir hasta inventar nuevos caminos
Cuando abro los periódicos (perdón por la inmodestia, pero a… un poco de verdad es más alimenticia y confortante que un par de huevos a la mexicana…
He aquí la regla de oro, el secret… Tener un sitio para cada cosa y tener cada cosa en su sitio. Así arreglé… Impecable anaquel el de los libros…
Voy a ponerme a cantar el muy famoso corrido de un asunto que se llama el eterno femenino, y del que escriben los sabios
Quisimos aprender la despedida y rompimos la alianza que juntaba al amigo con la amiga. Y alzamos la distancia entre las amistades divididas.