LA ADICCIÓN AL DINERO
No se puede poner una barrera
entre el ansia del hombre y el dinero,
porque sin ser atleta ni torero
la salta fácilmente a la torera.
Por mucho que se intente, no hay manera
de hacer que se le quite por entero
la idea de tener por compañero
a aquello que corroe su sesera.
Nadie pretende ser uno cualquiera
ni estar con la pobreza prisionero,
sino en la lista donde se leyera
su nombre y justo al lado, financiero,
y por si acaso a poco le supiera,
poner entre paréntesis: banquero.
Queriendo ser primero
en todo, el hombre siempre está a la espera
de llenar hasta el tope su cartera.
Liked or faved by...
Other works by Cristino Vidal Benavente...
¿CUÁL ES SU PECADO? (A los que pretenden llegar a Europa, acuciados por el hambre, la miseria y los horrores de la guerra y se les cierran las puertas).
¿Tan grave es el pecado, ¡Cielo S… que lleva aparejada esta condena? ¿Quién les ha impuesto semejante p… que es del terrible infierno un ad… Se puede aguantar mucho, ¿pero tan…
