Decisión, que puede ser
trascendental
pero que es un incierto
cómo una botella de mensaje
de esas que son arrojadas al mar.
Guardare lo bueno,
porque todo lo fue
tu pena, la que me confiaste
y yo la aseguré
Quisiera ser rebelde,
revolucionario ante tu resolución
pero mostraré un decoro
a pesar de mi verdadero querer,
no sin ello advertir
que me tendrás aquí
para cuando quieras reír, llorar y ¡amar!