#Cubanos #Matanceros #Mujeres #ParaNiños #SigloXX
En la casa que recuerdo, en la casa, entre el naranjal y el cielo: plátano indio, plátano congo,
Tiene la vaca bermeja un ternerito de nata. Se lo encontró en el corral un jueves por la mañana. Quiso llevarlo a pasear
Sobre el mar hay una barca, sobre la barca un barquero, sobre el barquero
En su casa de hojas despierta el pájaro porque, anunciado el día, se entona el gallo. Canta seguido,
EL día, una rosa blanca. La noche, un caballo negro. (La tarde, una mariposa que ha detenido su vuelo.)
Cinta de arena para la nena. Gorro de sal para el coral. Y para el sol
Porque no saben quererte me dicen que eres muy fea. Duerme... Duerme... Duerme, que te coge el gato y las tijeras muerden.
Caperucita Roja, juega conmigo: yo seré un día lunes y tú domingo. Juega conmigo:
Abrigando el arroyo la caña brava, chorros de finas hojas al aire lanza. ¡Qué musicales ramos,
El cielo es un espejo y la gaviota suelta su vela blanca desde la costa. Marinera del aire,
Aserrín Aserrán. Puñadito de violetas, limoncito verdemar, anillito de corales.
¿Has visto a la mariposa danzando sobre el rosal para saludar la rosa...? ¿O los vuelos del zunzún alrededor de las flores
De parte del aguacero que cubran con un paraguas al retoño del almendro. El coralillo rosado debe prestar atención:
—¡Hola, Pinocho!, ¿qué haces ahí? —Busco una joya que ayer perdí. —Dime, Pinocho, ¿que joya?, di. —Un pedacito de mi nariz.
¡Que ruede la rueda de pan y canela! Que llegue al campo, que busque el trigo, que diga al agua