#Cubanos #Habaneros #Mujeres #PremioCervantes #SigloXX #1953 #PoemasSinNombre
Todo lo que era monte aquí, en est… Todo lo que era flor está cantado;… Se sabe el color de mi primera mar… Contado se han los milenios que me… Los sabios dieron nombres a mis va…
Para mí, Señor, no es necesario e… Y lo único que realmente necesito…
Si fuera nada más que una sombra sin sombras; que una intima tiniebla de dentro para fuera... Si fuera—nada más—la misma tiniebla de hoy... O la de ayer,
La mujer que tiene su amor en el m… es como más fina o más irreal: Va sobre la tierra y parece que va sobre el agua.—Un agua que no se v… La mujer que ama un amor de mar
¡Qué mar negro me circunda! ¡Qué ola me va a envolver! Voy a hacer con mi esperanza un barquito de papel... Lo echo al mar... ¡Y que navegue!
La luna entre los platanales desga… Es como si la palabra adiós, que n… Podríamos caminar hasta mañana y n… Pero nadie camina y nadie permanec… Sólo yo he sentido el frío de la l…
Poesía, bestia divina y salvaje...…
Todavía puedes poner tu dedo y tap… Todavía. Todavía, si tú me dices que está c…
El sol se ha rajado y cae un chorro de oro sobre mi corazón. Es un oro ardiente que salta sobre las nubes
¡Cómo se ha llenado de ti la soled… La soledad me huele a ti como si e… ¡Cómo está llena de ti la soledad,…
El gajo enhiesto y seco que aún queda del rosal muerto en una lejana primavera no deja abrirse paso a las semillas de ahora, a los nuevos brotes ahogados por el nudo de raíces que la pl...
Y primero era el agua: Un agua ronca, sin respirar de peces, sin orillas que la apretaran… Era el agua primero,
¿En la vara de Moisés, el de la cabeza flamígera, o en aquella humilde, reseca piedra del desierto? ¿O estaba, desde antes, en la enfebrecida sed, capaz de fecundar arroyos en cada pied...
Habló la nube, y dijo: –Soy y no soy. Estoy y ya dejé de… Habló la estrella, y dijo: –Tampoco yo soy yo. Millones de a… Habló el sueño, y dijo:
En cada grano de arena hay un derr…