#EscritoresMexicanos (1974) Los eróticos otros poemas y
Primero Que nada: Me complace Enormísimamente Ser
Claro está que murió —como deben morir los poetas, maldiciendo, blasfemando, mentando madres, Claro que así murió y su muerte resuena en las malditas habitaciones donde perros, orgías...
Más despacio que nunca, casi agóni… marchan y duelen estas voces o est… Húmedos pies descalzos, breves pie… dulce origen, impío desorden. Voce… que purifican lo que tocan. Voces
En el taller del alma maduran los… crece, fresca y lozana, la ternura… imitando tu sombra, inventando tu ausencia tan honda y sostenida.
Labios como el sabor del viento en… dientes jóvenes de luna consentida… Se endurecía la noche en tu gargan… Espacio duro de tus senos. Amaril… la inesperada sombra de tus pierna…
Fuiste cuando el silencio era una… cuando sabias corolas daban el equ… y claras lunas tibias como pequeña… llevaron al abismo los insomnios p… y los deseos por vivos y angustiad…
La Primavera Se ha Venido Nadie
Siempre Amé Con la Furia Silenciosa
Lo primero es el cielo. Después v… el espléndido dios que todo lo atr… con su nariz agujereada y sus miem… comidos por el hambre de siglos. El dios vivo y marcado, ungido
Puede ser la voz de amor no dicha, la propia dicha convertida en agua (agua en un lecho durísimo como su… y un hombre caminando como loco en delirante busca del sexo perdid…
Andar así es andar a ciegas, andar inmóvil en el aire inmóvil, andar pasos de arena, ardiente cés… Dar pasos sobre agua, sobre nada —el agua que no existe, la nada de…
Éste es un amor que tuvo su origen y en un principio no era sino un p… y una ternura que no quería nacer… Un amor bien nacido de ese mar de… un amor que tiene a su voz como án…
En estos precisos momentos todo mo… que los jóvenes negros se amen a l… bajo el ruinoso techo del Eads Br… y que su risa sea del color de la… Que se amen larga y estrechamente…
Escribo bajo el ala del ángel más… la sombra de la lluvia y el sonreí… me conducen, oh estatuas, hacia un… hacia donde se encierra la gran se… Escribo las palabras y el penetran…
Outside!, chilló la negra, la negra fea del bar. Outside!, volvió a chillar con una voz más negra que su negro mirar.