*Aquel Amor*
Amor recordado
Aquel amor que iba mucho más allá
De esparcir a su muy diáfana presencia
Pétalos de claveles rojos recién cortados
Como un regalo tierno a su regazo sagrado
Y abrazados formando corazones con ellos
Sintiendo torrente lava correr desde dentro
Absorto en el embrujo de su miradas
Envueltos en la vorágine del deseo.
Un amor más que tejer un dorado idilio
Con los hilos plateados de la febril mente
Entregarse a aquellas pupilas que arrasan
Con la irreverencia de quella vez primera
Locura pulverizando los diques y fronteras
De las inéditas horas de torrido romances
A su boca, a su piel, sus formas, a su centro
Por el triángulo de piernas de marfil expuesto.
Era mas que sentir impotente, débil y atrapado
Entre las intrincadas redes del torrente de besos
O calcinarse todo allegándose a la voraz flama
Del volcán que resucita de ligero en el pecho
Ese que me destruye pero me une a su esencia
En las interminables noches de líquido anhelo
Estando a lustros de distancias nuestros cuerpos.
Era ese amor, que desdibujaba nuestros rostros
En los cristalinos espejos de los ojos del alma
Avistamiento del interior de descifrar oculto
Aquello que solo entienden los que se aman
Como el paisaje de dos almas en pleno vuelo
O nuestra melodía orquestada por el viento
Con un arreglo magistral de un solo verso.
Era aquel amor, que revive en el alma el tormento
De imaginar perderlo de vista, en aciago momento
Como la hoja seca entregada el brazos la brisa
Como un antiguo espejo que difumina la sonrisa
Como el embriagante chasquido de robado beso.
Amor que hacia cantor al silencioso monte
De magicas melosdias y tiernas promesas
Que era superior a la valiente proeza
Que se remontaba al abierto horizonte
Con el gemir sentido de vidalas
O con al ritmo excitante de un bolero
El amor bordado en el telar traslucido del viento
Esparcido por el majestuoso Condor en su vuelo
Acunado por los capullos de nubes en el cielo
Tatuado en las paredes celestes del recuerdo
Declamado en el susurro de un:
“ Te Quiero”.
Era aquel amor, una fuerza indomable que desafiaba todas las expectativas y convenciones. Era un amor que trascendía las barreras impuestas por la sociedad y se elevaba por encima de cualquier limitación. No conocía fronteras ni condiciones, simplemente existía en su estado más puro y auténtico. Era aquel amor, una llama eterna que brillaba incluso en los momentos más oscuros. Cuando las lágrimas caían como notas de una Vidala cargada de tristeza, su amor se volvía aún más fuerte, consolador y sanador. Era una fuerza que les recordaba que, a pesar de las dificultades, siempre tendrían el apoyo y la fortaleza del otro. Era aquel amor, una danza de pasión y entrega que los consumía por completo. Cada encuentro era un bolero desenfrenado, donde sus cuerpos se entrelazaban en un vaivén de emociones y deseos. Era un amor que los llevaba a explorar los rincones más íntimos de su ser, sin temor a perderse en el abismo de la pasión. Era aquel amor, una melodía que resonaba en cada latido de sus corazones. En cada mirada, encontraban la complicidad y el entendimiento mutuo. Se conocían más allá de las palabras, como si sus almas estuvieran entrelazadas desde mucho antes de encontrarse en este mundo. Era un amor que trascendía el tiempo, como si estuvieran destinados a encontrarse una y otra vez. Era aquel amor, un refugio seguro en medio de la tormenta. Cuando el mundo se volvía caótico y confuso, encontraban consuelo en los brazos del otro. Era un amor que les daba fuerzas para enfrentar cualquier adversidad y superar cualquier obstáculo. Juntos, se convertían en un equipo invencible, listos para afrontar cualquier desafío que la vida les presentara. Era aquel amor, una historia que perduraría en los corazones de quienes tuvieron la suerte de presenciarlo. Era un legado de amor, una inspiración para aquellos que anhelaban encontrar una conexión profunda y verdadera. Era un recordatorio de que el amor sublime existe, y que cuando dos almas se encuentran en perfecta armonía, pueden crear una sinfonía de amor que trasciende los límites del tiempo y el espacio.
