La primera vez no te conocí. La segunda, sí. Dime si el aire te lo dice.

En la torre amarilla, dobla una campana. Sobre el viento amarillo,

Si muero, dejad el balcón abierto. El niño come naranjas. (Desde mi balcón lo veo). El segador siega el trigo.

Enrique, Emilio, Lorenzo. Estaban los tres helados: Enrique por el mundo de las camas;

Fresquísimas violas. Bandadas de rubores levantados por este don de lágrimas que enlaz… la muchedumbre de las viejecillas con la niña y el niño de mi frente…

Los arqueros oscuros a Sevilla se acercan. Guadalquivir abierto. Anchos sombreros grises, largas capas lentas.

¡Ay qué trabajo me cuesta quererte como te quiero! Por tu amor me duele el aire, el corazón y el sombrero.

Alta va la luna. Bajo corre el viento. (Mis largas miradas, exploran el cielo.) Luna sobre el agua.

La luna pudo detenerse al fin por… Un rayo de luz violenta que se esc… proyectó en el cielo el instante d… La sangre bajaba por el monte y lo… pero los cálices eran de viento y…