Yo como Tú comes El come Nosotros comemos Vosotros coméis

Invade el mundo un ¡ay! un ay atroz, y siempre el ¡ay! del ¡ay! es ley… el ¡ay! porque no hay. El ¡ay de mí!

A veces quiero preguntarte cosas, y me intimidas tú con la mirada, y retorno al silencio contagiada del tímido perfume de tus rosas. A veces quise no soñar contigo,

El camello se pinchó con un cardo del camino y el mecánico Melchor le dio vino. Baltasar

Miradme aquí, clavada en una silla, escribiendo una carta a las paloma… Miradme aquí, s que ahora podéis mirarme.

Cuando un árbol gigante se suicida… harto de estar ya seco y no dar pá… sin esperar al hombre que le tale, sin esperar al viento, lanza su última música sin hojas

El burro nunca dejará de ser burro… Porque el burro nunca va a la escu… El burro nunca llegará a ser cabal… El burro nunca ganará carreras. ¿qué culpa tiene el burro de ser b…

Lo importante de un niño no es que sea un empollón y recite como un loro sin entender la lección. Lo importante de un gato

Doce cerditos Ocho tetitas tiene mi cerda, ocho tetitas —y orgullosa de ellas.

Una y una, dos. Dos y una, seis. El pobre burrito contaba al revés. ¡No lo sabe!

“El divorcio no es cosa de tres, es cosa de dos que no aciertan a ser uno” *** “Cargada de espaldas

Nací para poeta o para muerto, escogí lo difícil —supervivo de todos los naufragios… y sigo con mis versos, vivita y coleando.

Cuando se quiere a una persona, te duele que le duela, te cansa que se canse, te agota que se agote, te entristece que se entristezca,

A primeros de enero de un año cual… con amores y nombres seleccionados… con los huesos maduros a mitad de… me PROMETO solemne no sufrir de… Si me pegan, que peguen,

Escribo como escribo, A veces deliberadamente mal, Para que os llegue bien.