Loading...

101. Comprende que no somos inmortales

Una carta del pasado donde me propuse el mundo cuando parecía cercano

Una hoja no tan blanca en una esquina algo remota,
un lápiz con mal tajado, pero inspiración de sobra.
Ilusiones tan grandes, la vista puesta en otras cosas,
par de borrones bien marcados, arrugas en toda la hoja.
 
Unos deseos tan sensatos en esas épocas tranquilas,
seguro un día relajado, domingo pelis en taquilla.
Donde el Malibú corría y las riendas se soltaban,
cantando himnos a pulmón como si dolor habría.
 
Unifico este momento con una carta a mi mismo,
sin perder nunca el respeto, me halago como principio,
puede que sean 3 años, días de cole tan distintos,
el grafito resaltado me deja atónito y perdido.
 
Únicamente hablo de acciones fuertes de superación,
la luna era grande ese año, abusando sin razón,
tantos trayectos en el tren para verte entre noches.
Tiempos ya sin odio alguno, pero dignos de corazón.
 
Uno mismo determina que tanta azúcar hay en vida,
mas llevarla a ser un parque distorsiona el momento,
no es lo mismo declararse y tener claro un movimiento
a declarar ser solo un joven y de tan débil sentimiento.
 
Uniforme siempre ha sido en sí mi comportamiento,
a veces con cara de odio, pero extrovertido siento.
Bastó que alguien se de cuenta que tan torpe para esto,
y ese mismo alejamiento me choca hasta estos tiempos.
 
Unas ganas tan grandes de escaparme en esta hoja,
acompañan unas quejas e incumplimientos olvidados,
he superado algunas tantas, mas existe deuda alguna,
considero relevantes los finales del recado.
 
“Usa bien lo que tienes”. Ahora pregunto qué es eso,
será mi hábito de cagarla justo en el último momento,
no me escapé, caí en toxicidades, mentiras y deseos,
pero crecí y le respondo a mi estimado compañero.
 
Úlceras morales de tantos días tan vacíos, entiéndeme.
Sin alguien que aprecie todos mis movimientos, capta.
Ahora escribo, he superado tantos miedos, reflexiona.
Perder una simple batalla no significa el fin del juego.
 
GFRC

No se si te pasa, de más chico me escribía cartas para el futuro, pero perdía la mayoría entre papeles y otras cosas. El otro día encontré una del 2016 en la cual sonaba tan inmaduro y deseoso de todo. No me culpo, hasta ahora sigo con algunos principios, mas siento que he ganado más de lo que en realidad ha pasado.

Other works by Gonzalo F. Rosales...



Top