#1963 #EscritoresUruguayos #NociónDePatria
A partir de 1980, yo había estado varias veces en Copenhague y siempre había cumplido con el rito de rendir homenaje a la legendaria sirenita de Eriksen. Debo reconocer, sin embargo, qu...
Todo está lejos pero es un modo de decir en realidad no tengo patrón univer… para medir cercanos y remotos los bienaventurados se escabullen
Cierro los ojos y no existe el prójimo se terminan la lucha
La anestesia me introduce en una p… me recompensa con una borrachera d… no la mía / otra infancia / la que… me brinda un perro fiel que corre… y vuelve a mí con un crucifijo ent…
En las puertas de hoy ya no se usan, pero en las viejas puertas había siempre alguna mano (de hierro, de bronce) que era antes que nada un llamador. A Inés le habían atraído estas manos...
Mientras comían juntos y distantes… ella muy lentamente y él como ensi… hablaban con medida y doble parsim… de temas importantes y de algunos… entonces como siempre o como casi…
Voy a cerrar los ojos en voz baja voy a meterme a tientas en el sueñ… En este instante el odio no trabaj… para la muerte que es su pobre due… la voluntad suspende su latido
Si estaremos curados de espanto si habremos barajado salmodias con… sepultado alegrías conjeturas deli… en el descalabro y en el camposant… si habremos añorado nuestras azote…
Esta cotidiana no se apoya en ning… hoy es tan sólo un viernes de poca… sin noticias o trazos demasiado ma… ni tampoco demasiado buenos funcio… las endocrinas y los semáforos
«¿Y eso por qué?», preguntó Montse en su tercera sesión de café montevideano. «Sencillamente porque la dictadura nos dejó una herencia de mezquindad», respondió Jorge, «un legado ...
Quedan las cáscaras de vida la solidaridad de las columnas las pausas del escombro el pavoroso cielo gris la tierra exasperada
Cuando Agustín sintió un fuerte dolor en el pecho, anunció de inmediato a sus familiares: «Esto es un infarto». Sin embargo, el médico diagnosticó aerofagia. El dolor se aplacó con una ...
Tu espejo es un sagaz te sabe poro a poro te desarruga el ceño te bienquiere te pule las mejillas
Hallaré a tantos como se proponga la piel de mis quimeras hallaré los presagios de los jóven… los años ya sin fondo de mi madre
Al principio eras niño como yo pero mucho más ágil no sólo me advertías de la baldosa floja