#EscritoresCubanos #Ismaelillo
En el negro callejón Donde en tinieblas paseo, Alzo los ojos, y veo La iglesia, erguida, a un rincón. ¿Será misterio? ¿Será
Odio el mar, sólo hermoso cuando g… Del barco domador bajo la hendente Quilla, y como fantástico demonio De un manto negro colosal tapado, Encórvase a los vientos de la noch…
Cuentan que un viajero llegó un día a Caracas al anochecer, y sin sacudirse el polvo del camino, no preguntó dónde se comía ni se dormía, sino cómo se iba a donde estaba la estatua de B...
Por donde abunda la malva Y da el camino un rodeo, Iba un ángel de paseo Con una cabeza calva. Del castañar por la zona
Allí despacio te diré mis cuitas, ¡Allí en tu boca escribiré mis ver… ¡Ven, que la soledad será tu escud… Ven, blanca oveja, Pero, si acaso lloras, en tus mano…
Siempre que hundo la mente en libr… La saco con un haz de luz de auror… Yo percibo los hilos, la juntura, La flor del Universo: yo pronunci… Pronta a nacer una inmortal poesía…
Este es el número de La Edad de Oro, donde se ve lo viejo y lo nuevo del mundo, y se aprende cómo las cosas de guerra y de muerte no son tan bellas como las de trabajar: ¡a saber si el ...
En el alféizar calado De la ventana moruna, Pálido como la luna, Medita un enamorado. Pálida, en su canapé
Hijo, en tu busca Cruzo los mares: Las olas buenas A ti me traen: Los aires frescos
Si quieren que de este mundo Lleve una memoria grata, Llevaré, padre profundo, Tu cabellera de plata. Si quieren, por gran favor,
Sueño con claustros de mármol Donde en silencio divino Los héroes, de pie, reposan: ¡De noche, a la luz del alma, Hablo con ellos: de noche!
Odio la máscara y vicio Del corredor de mi hotel: Me vuelvo al manso bullicio De mi monte de laurel. Con los pobres de la tierra
Los pueblos todos del mundo se han juntado este verano de 1889 en París. Hasta hace cien años, los hombres vivían como esclavos de los reyes, que no los dejaban pensar, y les quitaban m...
¿Por qué no acaba todo, ora que pu… Amortajar mi cuerpo venturoso Con tu mantilla, pálida andaluza? No me avergüenzo, no, de que me en… Clavado el corazón con tu peineta!
Yo sacaré lo que en el pecho tengo De cólera y de horror. De cada vi… Huyo, azorado, como de un leprosos… Ando en el buque de la vida: sufro De náusea y mal de mar: un ansia o…