#EscritoresCubanos #FueraDelJuego
El hombre que devora los periódico… no está en un circo como los trape… candela. Si hace un poco de sol se le puede… parques nevados o entrando en el M…
El puñetazo en plena cara y el empujón a medianoche son la f… El vamos, coño, y acaba de decirlo… es el crisantemo de los condenados… No hay luna más radiante
Pueden fotografiarlas junto a un rosal en un jardín etrusco frente a la columnata del Partenón con sombreros enormes
Entre marzo y abril está mi mes má… Apretado a tus brazos ascua feliz el más tierno y salvaje te dije:
Cuando alguien muere, alguien (ese enemigo) muere de frente al plomo que lo mata, ¿qué recuerdos, qué mundo amargo, nuestro, se aniq…
Entre la realidad y el imposible se bambolea el único poema. Retenl… con las manos, o con las uñas, o c… (si es que puedes) o la respiració… Dótalo, con paciencia, de tu amor
En una de estas tardes me pondré guantes blancos, frac negro, sombrero; iré a la calle Behren,
Una muchacha se está muriendo entr… Dice que es la desconcertada de un… Que anduvo noche y día para encont… Que ama las piedras grises de mi c… Dice que tiene el nombre de la Re…
Para seguir la música en las líneas de fuego, ensayé tantos ritmos torpes y olvidados. Para aumentar la marcha
Cuando los últimos disparos resonaban en el turbio canal, y a través de los vidrios deshecho… se empezaba a borrar el humo negro… miramos, anhelantes,
Si después que termina el bombarde… andando sobre la hierba que puede… entre las ruinas que en el sombrero de tu Obispo, eres capaz (lo imaginar que no est…
El sol ha cedido en la sombra el mar encrespa de repente sus ola… Menea los manglares donde flotan cientos de garzas largas como preocupaciones
Di la verdad. Di, al menos, tu verdad. Y después deja que cualquier cosa ocurra: que te rompan la página querida,
La primavera le da la razón. El viento lo inunda y puede descif… Los árboles pueden comprenderlo. La vida quiere dialogar con él. ¡Porque hoy este hombre ama!
Protégete de los vacilantes, porque un día sabrán lo que no qui… Protégete de los balbucientes, de Juan-el-gago, Pedro-el-mudo, porque descubrirán un día su voz f…