#EscritoresMexicanos
Los conejos mañaneros se levantan los primeros, y moviendo las orejas se van. Van al horno pues les gusta
El burrito está llorando... ¿Qué le pasa? ¿Qué le duele? ¡Si será que va a enfermar! El burrito está llorando... ¡Pobrecito! En la escuela
Abuelito... (¡Voy! ¡voy!) Ven a contarme algún cuento de esos mil que tú te sabes y que trate de misterio o de amor.
Los enanos se marcharon todos a nadar, en el lago fresco y claro van a chapotear. Y saltando dan de gritos
Un perrito, una zorra, un ratón, y ya son tres. Qué curioso, qué bonito, todos tienen cuatro pies. Pero al rato vino un pato
Al sonar las tres de la mañana Los muñecos se paran a bailar. La casa está dormida, Nadie los verá, Y salen de sus cajas
Dime pajarito si para cantar mueves el piquito para arriba y para abajo sin parar.
Siempre después de cualquier aguacero fíjate bien lo que pasa en el cielo: poco a poquito
El abejorro Mostachón, afilando su aguijón, se escondió detrás de un alcatráz con ganas de picar.
La gota de agua que da la nube como regalo para la flor en vapor se desvanece cuando se levanta el sol; y nuevamente al cielo sube
Un banquito quisiera comprar, un banquito con sus cuatro patas, para en ellas poderles calzar un surtido cabal de alpargatas. Y luego irle enseñando,
(¡Trrrrrrrrrrrrr! ¡Trrrrrrrrrrrrr… Las noches de verano son luminosas y tibiecitas. Cantan las chicharritas: “¡lara lara lara la!”
La casa blanca de techo rojo, un árbol verde, el cielo azul y remolinos color de ocre con los que juega el viento sur. Bajo la sombra, dulces violetas;
La Negrita Cucurumbé se fue a bañar al mar para ver si en las blancas olas su carita podía blanquear. La Negrita Cucurumbé
Van los novios en camino a la iglesia del lugar: son dos blancas palomitas que se van a casar. La paloma es preciosa