#1923 #Crepusculario #EscritoresChilenos
Apenas te he dejado, vas en mí, cristalina o temblorosa, o inquieta, herida por mí mismo o colmada de amor, como cuando tus…
Una vez más, amor, la red del día… trabajos, ruedas, fuegos, estertor… y a la noche entregamos el trigo v… que el mediodía obtuvo de la luz y… Sólo la luna en medio de su página…
Patio de esta tierra luminoso pati… tendido a la orilla del río y del… Inclinado sobre la boca del pozo del fondo del pozo me veo brotar como en una instantánea de sesenta…
Su cuerpo es una hostia fina, míni… Tiene azules los ojos y las manos… En el parque los árboles parecen c… los pájaros en ellos se detienen c… Sus trenzas rubias tocan el agua d…
Pensando, enredando sombras en la… Tú también estás lejos, ah más lej… Pensando, soltando pájaros, desvan… enterrando lámparas. Campanario de brumas, qué lejos, a…
Innecesario, viéndome en los espej… con un gusto a semanas, a biógrafo… arranco de mi corazón al capitán d… establezco cláusulas indefinidamen… Vago de un punto a otro, absorbo i…
Es la mañana llena de tempestad en el corazón del verano. Como pañuelos blancos de adiós via… el viento las sacude con sus viaje… Innumerable corazón del viento
Los que vivimos esta historia, est… los que escogimos el combate y vim… fueron nuestros únicos héroes y qu… llena la boca de jactancia y de pr… El pueblo movió la cabeza:
Del centro puro que los ruidos nun… atravesaron, de la intacta cera, salen claros relámpagos lineales, palomas con destino de volutas, hacia tardías calles con olor
Al golpe de la ola contra la piedr… la claridad estalla y establece su… y el círculo del mar se reduce a u… a una sola gota de sal azul que ca… Oh radiante magnolia desatada en l…
Ni el color de las dunas terribles… ni el estuario del Río Dulce de G… cambiaron tu perfil conquistado en… tu estilo de uva grande, tu boca d… Oh corazón, oh mía desde todo el s…
En mi cielo al crepúsculo eres com… y tu color y forma son como yo los… Eres mía, eres mía, mujer de labio… y viven en tu vida mis infinitos s… La lámpara de mi alma te sonrosa l…
Ahora contaremos doce y nos quedamos todos quietos. Por una vez sobre la tierra no hablemos en ningún idioma, por un segundo detengámonos,
En el mar tormentoso de Chile vive el rosado congrio, gigante anguila
Detrás de mí en la rama quiero ver… Poco a poco te convertiste en frut… No te costó subir de las raíces cantando con tu sílaba de savia. Y aquí estarás primero en flor fra…