#1988 #EscritoresUruguayos #VientosDelExilio
Cuando Adán el primero agobiado por Eva y por la soledad inventó cautelosamente a dios no tenía la menor idea de en qué túnel de niebla había me…
Desde el octavo piso de mi tercer… veo el mar excesivo que me prestan mercado viejo al norte donde el qu… se llama luz brillante y al oeste otro mercado el nuevo adonde llega…
Yo digo ¿no? esta mano que escribe mil doscientos y transporte y Enero
Aquí empieza el descanso. En mi conciencia y en el almanaque junto a mi nombre y cargo en la pl… aquí empieza el descanso. Dos semanas.
Están en algún sitio / concertados desconcertados / sordos, buscándose / buscándonos bloqueados por los signos y las du… contemplando las verjas de las pla…
Sé que no bastarían las mejores enredaderas del verano para cubrir el muro de mis lamentos lo curioso es que esos plañidos
Lejos quedó el exilio descubierto en ensueños brumosos o cubierto de olvido un jardín más o menos irrisorio del que tomamos cuatro rosas
No olvidadizos sino olvidadores he aquí que también llegan entre otras herrumbradas circunsta… la degeneración / las taras del ol… la falsa amnesia de los despiadado…
Quizá fue una hecatombe de esperan… un derrumbe de algún modo previsto ah pero mi tristeza sólo tuvo un s… Todas mis intuiciones se asomaron para verme sufrir
Cielito cielo que sí cielito del 26 las nubes van allá arriba la tierra bajo los pies que haya espesos nubarrones
Tal vez haya un rigor para encontr… el corazón de rosa rigurosa ya que hablando en rigor no es poc… que tu rigor de rosa no te harte. Rosa que estás aquí o en cualquier…
La pena aletea como un fuego fatuo sobre los cementerios y otras verb… es un fantasma de mejillas blancas que se duele de todos y de nadie la pena sueña con amaneceres / llo…
Aquí la soledad se pone oscura el viento insiste al final del día estoy cansado como después de un s… y aunque me gustaría brindar con a… bebo el vino en un vaso de vidrio…
Otra vez estoy solo tan hondamente solo que no siento la ayuda ni el calor
Luego del próximo recodo tal vez convenga irlo pensando sé de un viejo compatriota terrateniente él que en su colchón de muerte