#EscritoresEspañoles #Generación27
Se junta el follaje en ramo, Y sólo sobre su cima Dominio visible ejerce La penetración de brisa. Desplegándose va el fuste
El vaivén de la esquila De la oveja que pace... En su punto la tarde: Fina monotonía. ¡Polvareda de calma,
¡Se me mueren! Han vivido con fidelidad: cristianos servidores que se honran y disfrutan ayudando, complaciendo a su señor,
Después de aquella ventura Gozada, y no por suerte Ni error —mi sino es quererte, Ventura, como madura Realidad que me satura
Conchas crujientes, conchas, conchas del Paraíso... Las descubren, perdidas para los dioses, indios. Entre las arenas los llaman
Pelados, tristemente naturales, en inmovilidad de largas crines desgarbadas, sumisos a confines abalanzados por los herbazales, unos caballos hay. No dan señales
Ya es secreto el calor, ya es un r… de gozosa penumbra compartida. Ondea la penumbra. No hay suspiro flotante. Lo mejor soñado es vida. El vaivén de un silencio luminoso
Hacia un posible mas allá del caos van los días del hombre valeroso, y emergiendo de brumas y de vahos sueñan, inventan en tensión de cos… El tiempo se enriquece, se desgast…
Ya se acortan las tardes, ya el po… Nos descubre los más hermosos ciel… Maya sobre las apariencias velos Pone, dispone, claros a la mente. Ningún engaño en sombra ni en penu…
Sí, más verdad, Objeto de mi gana. Jamás, jamás engaños escogidos. ¿Yo escojo? Yo recojo La verdad impaciente,
Llegó la sangre al río. Todos los ríos eran una sangre, Y por las carreteras De soleado polvo —O de luna olivácea—
¡Damas altas, calandrias! Junten su elevación algazara y montaña, todavía crecientes gracias a la mañana
Íntima y dúctil, la sombra aguarda… Sobre las piedras y sobre las brañ… Se junta. ¿Fin? El silencio recib… Los sones menguantes del mundo. P… Nada se pierde. La tierra en su s…
Miro hacia atrás, hacia los años,… Y se me ahonda tanta perspectiva Que del confín apenas sigue viva La vaga imagen sobre mis espejos. Aun vuelan, sin embargo, los vence…
Alguna vez me angustia una certeza… y ante mí se estremece mi futuro. Acechándolo está de pronto un muro del arrabal final en que tropieza la luz del campo. ¿Mas habrá trist…